Collado Villalba

Gómez Sierra o la mano que ‘meció la cuna’ del Urbanismo y de los dineros de todos los villalbinos

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
Fue a finales del siglo pasado (1999) cuando el por entonces flamante alcalde, José Pablo González, le entregó a su fiel ‘amigo y servidor’, José Antonio Gómez Sierra, el control del Urbanismo local en un municipio donde fincas y ladrillos se pagaban a precio de oro. Empezó derribando la barbacoa de un pobre vecino por no haber pedido licencia de obra y terminó su rocambolesca andadura apoyando sin rubor la faraónica e innecesaria obra del túnel de Honorio Lozano. La broma costó más de 40 millones



Tras el crujido de la burbuja inmobiliaria, Gómez Sierra (2007) abandona Urbanismo, ya en declive, para hacerse cargo de otra superconcejalía, la de Economía y Hacienda, convirtiéndose así en el dueño y señor en el manejo de los dineros de los villalbinos. Resultado: más de cien millones de euros en deudas, decenas y decenas de proveedores sin cobrar y una deuda millonaria a la Seguridad Social. ¡Ah!, y el Ayuntamiento en bancarrota.