Posibles depuraciones en el PSM

Todo parece estar supeditado a la fecha que fije Ferraz para celebrar las Elecciones Generales. Si el presidente Rodríguez Zapatero opta por convocarlas en 2012, Tomás Gómez, secretario general del PSM, puede verse obligado a frenar sus impulsos de revancha a la hora de abordar una más que necesaria renovación dentro del seno de algunas agrupaciones madrileñas. Si por el contrario, las Elecciones Generales se adelantan al próximo otoño, las depuraciones se realizarán a posteriori, pero siempre antes de finalizar este año. Y entre los que aparecen en el punto de mira del secretario general madrileño está, por un lado, Pedro Castro, ex regidor de Getafe y hasta el próximo mes de septiembre, fecha fijada para la celebración de una asamblea de alcaldes en la que se nombrará a su sustituto, presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP).

Gómez quiere que Castro deje de seguir controlando la agrupación socialista getafense y a tal fin busca su dimisión, única vía posible para nombrar una gestora en este municipio. El segundo de la lista es el ex alcalde de Collado Villalba, José Pablo González Durán, quien después del varapalo electoral recibido el pasado 22-M, renunció al acta de concejal en este Consistorio mientras se agarraba férreamente al cargo de secretario general del PSOE villalbino y al de miembro de la Ejecutiva regional, aun sabiendo que Tomás Gómez ‘se la tiene jurada’ desde que éste ganó las primarias frente a Trinidad Jiménez.

Pero ni en uno ni en otro caso la operación va a ser precisamente sencilla. Por ejemplo, si el PSM quiere hacer borrón y cuenta nueva en el seno de la familia socialista de Collado Villalba, antes tendrá que ‘lidiar el toro’ de la pareja formada por Enrique Benedicto y Ruth Porta, quienes -junto con José Pablo González- hacen y deshacen a su antojo en esta agrupación, tal como muchos militantes pudieron comprobar en la asamblea celebrada tras los comicios de mayo, donde estos dirigentes de ‘pro’ impusieron su ordeno y mando a la hora de silenciar a los más críticos con la gestión llevada a cabo en los últimos años por la familia josepablista. Sea cual sea el resultado de esta u otras operaciones similares, lo evidente es que el Partido Socialista, a tenor de los resultados obtenidos en las últimas elecciones municipales y autonómicas, precisa algo más que un simple repaso de chapa y pintura. Y la pregunta es: ¿Cuenta Tomás Gómez con la fuerza política necesaria para abordar dicha renovación?

El revanchismo del ex Ejecutivo popular de Torrelodones
Los daños colaterales del absurdo revanchismo puesto de manifiesto por algunos de los dirigentes del ex gobierno del Partido Popular en el Ayuntamiento de Torrelodones, cuyo máximo responsable durante las dos últimas legislaturas fue Carlos Galbeño, lo está pagando el nuevo Ejecutivo local presidido por la alcaldesa, Elena Biurrun, de Vecinos por Torrelodones. Y hablo de daños colaterales porque según los comentarios realizados estos días tanto por políticos locales en ejercicio como por otras personas vinculadas de una u otra forma con la política torrelodonense, el comportamiento de los miembros del anterior gobierno a la hora de abandonar sus puestos ha puesto en evidencia su afán de venganza contra los que suponían que iban a ser sus sucesores, y que no eran otros que sus compañeros de partido, con Javier Laorden a la cabeza. Pero las urnas quisieron que no fuera así, y el problema que siempre genera no hacer un adecuado traspaso de poderes, lo están pagando aquellos que nada tenían que ver con esta guerra fratricida en la que en los últimos meses, de una u otra manera, están involucradas algunas de las familias del PP en este municipio.

Y si a este problema añadimos la grave situación económica por la que atraviesan las arcas municipales, la gobernabilidad del Consistorio parece aún más compleja. De ahí el recorte en el gasto anunciado por el nuevo Equipo de Gobierno, en el que sólo la alcaldesa y dos ediles van a tener dedicación exclusiva.

La Policía de Galapagar y la seguridad en las urbanizaciones
Después de la colocación y puesta en funcionamiento de las cámaras de seguridad en el casco urbano de este municipio, el Servicio Periférico de Atención Policial (SEPAP) prosigue en su labor de aproximación al ciudadano y sobre todo de aquel que reside en urbanizaciones alejadas del casco. En la ronda de encuentros con los habitantes de estas colonias es donde se ponen de manifiesto las necesidades e inquietudes de los vecinos, explicándose además en qué están basadas estas actuaciones policiales. Todo lo que se haga por favorecer la seguridad de los galapagueños será bien recibido.