OPINIÓN
ALFREDO FERNÁNDEZ | Miércoles 22 de octubre de 2014
Este mes de junio han sonado las alarmas. Poco público en las plazas de provincia con figuras del toreo en los carteles. Por no hablar de municipios más pequeños, donde la asistencia de público a los espectáculos taurinos también ha descendido. Alicante, Badajoz o Burgos han tenido menos público. Son varios factores y la crisis hace mella en todos los sectores. Sin embargo, hay un dato claro y objetivo. Va menos público donde el precio de las entradas es caro, además de que la presencia del toro es cada vez más justa. Hay ferias, caso de Alicante, que se están pasando tres pueblos, lidiando novillotes por toros. El público también se cansa de que le tomen el pelo y cuando no hay emoción en el ruedo este gran espectáculo pierde todo su contenido. Hay que dignificar lo que es una corrida de toros y no un becerrada.
Nadie pide que el toro de Murcia sea el de Madrid, ni el de Alicante el de Pamplona, pero sí hay que mantener unos mínimos. Curiosamente, en los cosos donde sale el toro en toda la extensión de la palabra, la crisis se nota mucho menos y los aficionados siguen respondiendo en buena medida. Luego hay otra cosa: hay toreros muy buenos, con valor y que se los pasan muy cerca, pero les falta carisma y no meten público a las plazas porque están muy vistos y se prevé lo que pueden hacer. Faltan también novedades que ilusionen y sean capaces de convencer. Cuando un diestro no genera riqueza es muy complicado atender las tarifas que están exigiendo algunas figuras. La crisis afecta a todos, pero debe primar una concienciación general para apretarse el cinturón, incluido los toreros de la parte alta del escalafón.
Cambiando de tercio. Hay dos municipios que han cambiado de Equipo de Gobierno. Nos referimos a El Boalo, en ambos casos ahora con alcaldes socialistas tras los pactos alcanzados entre distintos grupos.
Las fiestas de El Bolado darán comienzo en breve y existe el rumor de que no habrá toros. Esperemos que se quede en eso, un rumor sin más, pero mal asunto que empecemos así. Por otra parte, Los Molinos tiene una feria de novilladas de mucho prestigio. Esperemos que los cambios no afecten a este ciclo.