ALFREDO FERNÁNDEZ | Miércoles 22 de octubre de 2014
El candidato del PP a la Alcaldía de Collado Villalba, Agustín Juárez López de Coca, está obligado a dar una vuelta de tuerca al tema taurino en esta localidad. Tres ferias -El Gorronal, San Antonio y Santiago Apóstol- que necesitan un rápido replanteamiento para dar trasparencia, frescura y sobre todo ahorro a una gestión puesta en entredicho a lo largo de 12 años de Gobierno socialista.
Un asunto turbio, oscuro, con muchos miles de euros de por medio gracias a ese binomio que tan bien les ha funcionado entre José Pablo González y Tomás Entero. El primero ha defendido al empresario contra viento y marea, a pesar de las calamitosas ferias que ha venido organizando las últimas temporadas.
A tal grado de proteccionismo ha llegado el el asunto, que durante 11 años continuados, que se dice pronto, José Pablo González no ha sacado a concurso abierto la gestión de la feria de Santiago Apóstol para dar la oportunidad a que otras empresas pudieran presentar una oferta más beneficiosa para las arcas municipales.
Debía existir cierto temor a que muchos empresarios, que los había, presentarán en su plica un producto de mayor calidad y más ajustado en lo económico al que ofrecía Entero.
Todo esto ha presentado un tufillo putrefacto, y más cuando las estrechas relaciones entre este empresario y José Pablo iban creciendo y, en varias ocasiones, se les ha podido ver muy juntos a en varias plazas de toros lejos de Collado Villalba.
El Faro del Guadarrama lleva años denunciando esta situación, e incluso hemos sido vetados por empresa-Ayuntamiento.
Hay que confiar en que Juárez, en caso de acceder a la Alcaldía, realice una buena limpia para dar por fin una trasparencia muy necesaria. Tampoco estaría de más investigar las concesiones realizadas en este apartado .
El ahorro en la gestión taurina en Villalba debe ser un pilar fundamental. El Ayuntamiento está endeudado e hipotecado por la bochornosa gestión del PSOE y el nuevo Gobierno popular deberá buscar la fórmula de dar mayor calidad a un menor coste, como se demuestra con otro tipo de gestiones taurinas modélicas en municipios de la Sierra, gobernados por el Partido Popular.
En la Feria de San Antonio se ha venido presionando un año sí y otro también para que la Comisión de Mayordomos se decantara por Entero. A veces se les daba una “recomendación” por las buenas para que optaran por la empresa afín al Gobierno josepablista. Sólo en una ocasión esta tradicional Comisión sacó los pies del tiesto, encontrándose con que les pusieron muchas piedras en el camino por no cumplir las directrices marcadas. Habrá que esperar que con el PP desaparezcan estas sucias e interesadas maniobras. Ya hay fundadas sospechas de que José Pablo quiere dejar todo bien atado para que Entero organice este año las ferias villalbinas, a pesar de haber elecciones. Ahora es el momento preciso de que el PP no lo permita y la coartada que se va a utilizar de que no da tiempo, no se la cree nadie. Esto no es San Isidro.
Un serial caro y cada vez peor
Por otra parte, convendría recordar que las ferias de Collado Villalba, han ido en los últimos siete años a menos de una forma alarmante, tanto en la calidad de los carteles y de las ganaderías como en un drástico descenso del número espectadores a la plaza de toros. Tampoco podemos obviar el alto precio de las entradas que ha fijado el empresario, por lo que se ha terminado de echar al público de la plaza. Puestos a ser objetivos, los primeros años de gestión del empresario de Colmenarejo fueron positivos, pero una vez que Tomás Entero se sintió totalmente respaldado por el alcalde villalbino, hizo lo que le vino en gana y sólo se ha dedicado a amasar miles de millones de beneficio anualmente. Luego, al ser un gestor inteligente, ha sabido manejar a ciertos taurinillos y personajes de Villalba para tenerlos controlados y que no se revelaran contra sus lamentables ferias. Herraderos, excursiones al campo y entradas para otras ferias de su circuito para así cortejar la buena voluntad de la gente.
Los resultados son como son y menos mal que a las peñas se las ha hecho un precio más “popular”, porque de lo contrario la asistencia a la plaza hubiera sido testimonial.
En el caso de obtener la victoria en los comicios del 22 de mayo, Juárez López de Coca deberá hacer buena limpia, hacer oídos sordos a las presiones de los interesados y replantearse seriamente este apartado, que supone una cifra relevante del presupuesto municipal.
La autogestión es el futuro
Si hubiera que elegir un modelo de gestión taurina para Collado Villalba, sería muy sencillo: la autogestión. La fórmula que se aplica en Guadarrama, Moralzarzal o Galapagar, todos ellos del PP, y que tan buenos resultados viene ofreciendo. Estoy seguro que el candidato a la Alcaldía sabrá escuchar a los buenos aficionados que hay dentro del PP local para elegir lo que mejor le conviene. En esta batalla de intereses seguro que también habrá muchos “estómagos agradecidos” que quieran apoyar a Tomás Entero. Agustín Juárez tiene la obligación moral de buscar lo que mejor le conviene a Villalba en el apartado taurino, que es un tema relevante en esta ciudad. Una Comisión Taurina de buenos aficionados de la localidad, porque aseguro que hay gente con capacidad para llevar bien el asunto. Ese es el camino, buscando calidad y ahorro.
Siempre puede haber un taurino al frente, pero controlado y siguiendo las pautas que se marquen. Espero que aunque algún empresario pueda venir recomendado, el líder del PP local sepa lidiar ese toro y prevalezcan finalmente los intereses generales de Villalba frente al monopolio y el enchufismo que ha dominado las últimas legislaturas.