El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
El candidato y presidente del Partido Popular villalbino, Agustín Juárez López de Coca, ha dado esta semana una nueva -y puede que definitiva- vuelta de tuerca al Caso Villalba, al anunciar que los próximos días se presentará una demanda contra el alcalde, José Pablo González, y su concejal de Hacienda (antes de Urbanismo), José Antonio Gómez Sierra, por los presuntos delitos de cohecho, prevaricación y malversación de fondos.
Todo ello después de que en los últimos días se hayan publicado nuevas informaciones que ponen en entredicho la ya de por sí endeble argumentación del regidor. En primer lugar, la constatación, tal como avanzó El Faro del Guadarrama, de que la familia del primer edil no ocupó únicamente la habitación 304 del hotel Grau Roig de Andorra, sino también la 305, lo que elevaría considerablemente el coste de su estancia (prácticamente el triple de lo que aseguró haber pagado). A esto hay que unir, atendiendo al artículo que el diario ABC publicó este lunes, el hecho de que el recibo que el alcalde mostró en el pleno presenta importantes diferencias con una factura tipo de este establecimiento hotelero, puesto que en el documento de José Pablo González, como ya denunció en su momento este semanario, no figura el detalle de la estancia, además de que el número de la factura es mayor que el de otra -cursada 20 días después- a la que el decano de la prensa madrileña tuvo acceso. Pero además, este mismo periódico aseguraba el miércoles que el regidor ahorro más de 600.000 euros a los constructores del túnel-parking de Honorio de Bailén, al permitir que la UTE Ortiz-Cover no llevase parte de los restos de la obra al vertedero, sino que se depositaron en la zona de la ITV, donde quedaron casi 17.000 metros cúbicos de tierra compactada procedente de este faraónico proyecto. Un hecho que, por otra parte, también había advertido El Faro del Guadarrama hace más de un año. Ahora, estas evidencias han hecho que el PP haya decidido llevar a los tribunales las relaciones de González y Gómez Sierra con los empresarios locales José Carlos Gómez y Evaristo Núñez Milara. Una decisión valiente que debe ser aplaudida de forma inequívoca, por cuanto ha de ayudar a poner luz a un turbio entramado que el alcalde se ha empeñado en intentar esconder, si bien él mismo ha ido cayendo en una espiral de contradicciones que sólo ahora puede tener solución. Era necesario que alguien diera el paso, y Agustín Juárez lo ha hecho, demostrando además estar en condiciones de acceder a la Alcaldía, más aún cuando Collado Villalba necesita de forma urgente una regeneración democrática que ponga fin a unos años de oscurantismo y absoluta falta de transparencia, como demuestra el hecho de que José Pablo González se haya negado sistemáticamente a crear la Comisión de Investigación que le demandaban todos los grupos de la oposición. Después de todo, sus respuestas tendrán que llegar en el Juzgado, donde no podrá aplicar el rodillo de su mayoría para imponer el silencio.