El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
La entrega de una réplica en bronce de sus manos, obra realizada por el escultor Santiago de Santiago, marcó uno de los momentos más emotivos de la cena homenaje a Justo Martín Ayuso, acto celebrado el pasado 22 de octubre en reconocimiento a su trayectoria profesional y, de modo muy especial, “a la firma profundamente humana de sus obras”. Así lo fueron destacando los numerosos testimonios que llenaron de contenido esta velada, en la que se dieron cita autoridades de varios municipios madrileños, representantes del mundo taurino, presidentes de peñas y asociaciones, y vecinos de Galapagar, pueblo natal del taxidermista.
Además de expresar su reconocimiento a Justo Martín por su labor y contribución en favor de la Fiesta Nacional, el alcalde galapagueño, Daniel Pérez, subrayó el importante vínculo del artista con este municipio, cuyo nombre figura allá donde llegan sus trabajos, presentes ya en más de 110 países. Una intervención que tuvo continuidad en los discursos de otras destacadas personalidades, como el empresario de Colmenarejo Tomás Entero, quien destacó la sencillez de Martín Ayuso como una de sus principales virtudes, basándose su trabajo en “un hacer callado, humilde, un ejercicio de auténtica honestidad”.
También acudió Juan Béjar, presidente de la Asociación Nacional de Taxidermistas, así como representantes de la Peña de Victorino (Galapagar), la Peña José Tomás (El Escorial) y la Asociación Cultural Taurina José Miguel Arroyo Joselito (Valdemorillo).