El buen estilo

La localidad madrileña de El Álamo fue noticia la pasada semana. Los últimos años, Tomás Entero había estado al frente de esta feria, sin demasiado brillo y con mucha subvención municipal, como es costumbre en este habilidoso empresario.

Este año, el Ayuntamiento no atraviesa precisamente por una boyante situación económica, por lo que prescindió de los servicios del empresario de Colmenarejo. Buscaron nuevos aires y organizaron ellos mismos la feria, contando con otro organizador. Se montaron tres novilladas con picadores. Pero la noticia saltó cuando el primer festejo fue suspendido. La mesa de seguimiento del convenio colectivo nacional taurino, que se dedica a vigilar que los empresarios cumplan con lo estipulado y paguen lo que corresponde, secundaron una huelga y la primera novillada no se dio.

Los responsables de la citada entidad remitieron una carta a este Consistorio, exigiendo el cumplimiento de varios puntos. El primero resulta chocante y sienta precedente.. Exigían que pagaran al empresario de los últimos años -es decir, Tomás Entero- una pequeña cantidad que parece ser que el Ayuntamiento le debe. Según ha podido saber este periódico la factura tiene algún defecto y aún no se ha podido solucionar.

También figuraba el hecho de que a los novilleros se les había obligado a firmar como que les habían liquidado los honorarios mínimos sin haberlo hecho.

Lo que resulta impactante, si esto fuera cierto, es que el primer requisito sea el pago a Tomas Entero. A lo mejor resulta que él es quien está en la sombra de la mesa de seguimiento, cuando lo importante es que se vele por la integridad de los profesionales y no para amenazar con una huelga y dejar sin toros a un municipio por el simple hecho de que no se haya saldado una cuenta anterior que deberán pagar en su momento.
¿Por qué no ocurre esto con cientos de empresarios a los que muchos ayuntamientos todavía deben el pago de facturas? ¿Es prioritario primero pagar a un empresario qué abonar a los toreros? Se comenta que quien ha movido ficha en este caso ha sido el propio Tomás Entero, y está muy bien un Ayuntamiento pague lo que debe, pero dejar sin toros a un municipio sólo por el hecho de que te deban unos euros y te hayan dado boleto no parece coherente.