Opinión

“Demasiadas escopetas para un solo pato”

AL OTRO LADO DE LA SOMBRILLA

Blanco y los ‘simanquistas’ se la tienen jurada a Gómez - José Pablo González y su labor de ‘kamikaze’

Manuel J. Ortega | Miércoles 22 de octubre de 2014
El diputado del PSOE en el Congreso de los Diputados y ex alcalde de Madrid, Juan Barranco, ha afirmado que el secretario general del PSM-PSOE, Tomás Gómez “está siendo víctima de una auténtica persecución y soporta una situación muy injusta”. Durante su intervención en el programa “Hoy Madrid” de Onda Madrid (28-07-2010), Barranco añadió: “Hay demasiadas escopetas para un solo pato”. El ex alcalde de Madrid quiso enviar un mensaje a aquellos que utilizan las encuestas para intentar sustituir a Gómez como candidato a la Comunidad de Madrid: “Pensar que la política la rigen las encuestas o el marketing es un criterio que no comparto. Son herramientas de trabajo pero no un elemento decisivo a la hora de elegir o no a un candidato, porque si así fuera, cambiemos los estatutos y que en vez de que sean los militantes quienes elijan a los candidatos, lo hagan las encuestas”.


También el senador y alcalde socialista de Alcorcón, Enrique Cascallana, ha salido a la palestra para defender la candidatura de Tomás Gómez (‘ADN’ 27-07-2010), asegurando que “es el candidato que quieren los socialistas madrileños en las próximas elecciones autonómicas” y ha retado a “aquellos fantasmas que no dan la cara y que también quieren ser candidatos a que lo digan públicamente”. David Lucas, portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, según la agencia EFE (27-07-2010), ha expresado su “total apoyo, lealtad y respaldo” a Tomás Gómez, ratificando así el pronunciamiento de la mayoría de los diputados, alcaldes y cargos del Partido Socialista de Madrid reunidos en el Comité Regional (Europa Press 20-06-2010), quienes reclamaron que “su actual secretario general sea designado candidato y número uno a las próximas elecciones autonómicas”
Los simanquistas se la tienen jurada
Es evidente que Rafael Simancas y Ruth Porta son los que mecen la cuna de Tomás Gómez y para este fin cuentan por un lado con la colaboración de dos alcaldes de su propia cuerda, el villalbino José Pablo González y el fuenlabreño, Manolo Robles, simanquistas confesos y por el otro con el todopoderoso vicesecretario general del PSOE y Ministro de Fomento, José Blanco, conocido también en su Lugo natal como ‘o Bruxo de Palas de Rei’.

Y nuestra afirmación no es gratuita, está basada, como verán a continuación, en hechos concretos. El 29 de marzo de 2008, A.I.M escribía en el Semana Digital: “El primer roce entre simanquistas y el nuevo representante del socialismo madrileño se produjo cuando el PSM le tocó elegir a los tres senadores que le correspondían por designación autonómica, uno más que en 2004, por aumento de población. Tomás Gómez no quería que Ruth Porta entrara en la terna y continuara siendo senadora como en la anterior legislatura. Prefería que uno de sus fieles ocupara el lugar y no una mujer que representaba al sector simanquista del que no ha podido deshacerse Gómez. Porta no estaba dispuesta a renunciar a su escaño y para que la sangre no llegara al río, Ferraz optó por mediar en la contienda con un golpe de mando que no fue bien recibido por la Ejecutiva del PSM. José Blanco [aparece por primera vez en escena], por entonces secretario general del PSOE, no sólo frenó en seco a Gómez y permitió que Porta siguiera siendo senadora, sino que además la designó como secretaria general del Grupo Parlamentario Socialista en el Senado. Ahí fue donde comenzaron los enfrentamientos entre José Blanco y Tomás Gómez. Simancas, hoy portavoz del Ministerio de Fomento, aprovechó esta victoria moral para clavar el primer estoque público a Gómez con un demoledor artículo titulado “Madrid, asignatura pendiente” donde el ex secretario general le acusaba de los malos resultados obtenidos por los socialistas madrileños en las elecciones generales del 9-M.”
A partir de ahí, sus delfines bajo la dirección de Porta, entre los que destaca el concejal del Ayuntamiento de Madrid, Oscar Iglesias y los alcaldes de Collado Villalba, José Pablo González y el de Fuenlabrada, Manuel Robles, se erigieron en las voces críticas de su secretario general.

La evidente trama villalbina
La senadora Ruth Porta y su esposo Enrique Benedicto residen desde hace algunos años en Collado Villalba y mantienen una muy cordial relación con su protegido político el alcalde José Pablo González. Se dice que Pepe Blanco, además de haber participado en los dos últimos años en otros tantos actos oficiales organizados por la Agrupación socialista local, al parecer suele visitar el domicilio del matrimonio Porta donde, se comenta, podrían haberse planificado la operación de desgaste de Tomás Gómez, lo que explicaría las intervenciones en los medios del alcalde serrano unas veces para defender a Blanco de las supuestas críticas de Gómez por su ingerencia en el proceso de la elección del candidato socialista a la presidencia de la Comunidad de Madrid; otras desvelando los debates críticos producidos en el seno de la Ejecutiva socialista madrileña de la que él también es miembro y las más, dejando entrever que su actual secretario general no es la persona más adecuada para disputarle la presidencia de la Comunidad de Madrid a Esperanza Aguirre.

Con unas elecciones municipales a la vuelta de la esquina, donde el regidor villalbino ya empieza a ver las orejas al lobo a tenor del resultado de las encuestas realizadas hasta ahora donde el Partido Socialista tanto a nivel Comunidad de Madrid como en el resto del país (incluida Andalucía), está sufriendo a diario una grave hemorragia de votos que, salvo un milagro, va a cambiar el color de los gobiernos de la mayoría de los ayuntamientos españoles y el de Collado Villalba no va a ser, precisamente, una excepción, sobre todo si tenemos en cuenta el despilfarro del que ha hecho gala el Ejecutivo socialista presidido por González, capaz de construir en contra de la opinión de muchos villabinos un túnel y un aparcamiento totalmente innecesarios al módico precio de 40 millones de euros (alrededor de 7.000 millones de pesetas), o los desmanes urbanísticos habidos en los últimos años con permutas absurdas tanto en la zona de Las Eras como en la de Tres Cantos (¿se acuerdan del famoso polígono tecnológico del que nunca más de ha vuelto a hablar?), o el expolio sufrido por el patrimonio municipal a través de enajenaciones, subastas de suelo y permutas cuyas cuantías en contadas ocasiones se ajustaron a los precios de mercado. Por eso González, que ha confesado reiteradamente su intención de seguir siendo político a toda costa, ha aceptado el papel de kamikaze e igual que ahora va a por Tomás Gómez, mañana lo hará contra aquel o aquellos que le caigan mal a él o a sus ‘padrinos’. Contra El Faro también lo ha intentado, pero ese tema lo dejamos para el próximo lunes.