Truncada y para el olvido resultó la feria de San Antonio de Collado Villalba. El mal tiempo ayudó a la causa e hizo sus estragos hasta el punto que el festejo de rejones previsto para el sábado 12 de junio fue suspendido por el mal estado del piso de plaza y pospuesto hasta mañana; mientras, el domingo 13 la novillada con picadores hubo de ser suspendida a la muerte del tercer novillo por un fuerte chaparrón que obligó a que el público saliese despavorido y calado hasta los huesos.
Con este infortunio, apenas se puede rescatar nada de una feria plana y que un año más da otro pasito para atrás. Por unos u otros motivos, y entre unos y otros, están acabando con la solera de esta feria y los aficionados que cada año pasan por taquilla y asisten a los festejos lo saben muy bien y los están aburriendo, porque cada vez responde menos el público, y más en crisis. Desde hace cinco años, la cosa va de mal en peor, pero aquí no pasa nada porque el chiringuito de poder del Gobierno socialista protege el monopolio empresarial.
El único festejo celebrado al completo fue la novillada sin picadores celebrada el viernes 11 de junio. Los seis erales de Gabriel Rojas, de paupérrima presentación y muy chicos, salieron blandos y descastados. Lo más brillante de la tarde corrió a manos del colmenareño Sergio Sánchez, que dejó los mejores pasajes del festejo y mostró oficio y ganas de agradar, llevándose una oreja en el esportón. También puso tesón y decisión Víctor Álvarez en el eral que cerró plaza. Paseó un trofeo.
El domingo 13 era el festejo más interesante de los tres programados, con un atractivo cartel de novilleros y la lidia de un encierro de Hermanos González Rodríguez. Al final, Mario Alcalde, López Simón y Adolfo Ramos no estuvieron a la altura y pasaron de puntillas por Collado Villalba. El primer astado fue un bonito jabonero que embistió en las telas con clase y profundidad.
Mario Alcalde no acabó de entenderse con la boyantía del de Hermanos González y no acabó de redondear su actuación.
López Simón no pudo reeditar sus éxitos precedentes y se le vio envarado y demasiado encorsetado. Estuvo muy mal con los aceros. Adolfo Ramos mostró estar muy nuevo aún para estas lides.
El festejo de rejones aplazado se dará mañana, sábado. Novillos de Soto de la Fuente para Sergio Vegas (en la fotografía superior), Javier Cano y Antonio D’Almeida. La cita es a las 19.00 horas.
Becerrada para la reflexión...
En cuanto a la becerrada de las peñas celebrada el lunes 14, cabe decir que aunque sea un festejo de mofa, no deja de ser un espectáculo taurino. Invita a un profundo análisis. Por chiqueros fueron apareciendo becerros -con el hierro de Pilar y Tomás Entero- con un aspecto indecente. Flacos, de mal aspecto, como desnutridos, que iban besando el suelo y cayéndose una y otra vez. Cómo sería, que el primer añojo hubo de ser devuelto a los corrales por inválido, y eso que estamos hablando de un festejo de aficionados.
A alguien que juega a ser ganadero, que tiene una puntita de vacas por vanidad, lo mínimo que hay que exigirle es que presente dignamente el ganado, sea el festejo que sea. Luego ya podrán ser bravos o moruchos. Aunque se trate de una becerrada local, esto hay que tomárselo muy en serio y no dañar la Fiesta. Con cosas así, damos argumentos a los antitaurinos, y no estamos para tonterías.