El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
Ya que nuestro secretario general, alcalde y ‘padre espiritual’, José Pablo González Durán, habla en la prensa de nuestros compañeros de partido, no veo la razón de no hacerlo yo, humilde militante socialista, en este foro. Creo que la modernización a la que aludía en su explosivo comunicado sobre Tomás Gómez, se ha traducido en que a todos los niveles el centro de actividad política se ha concentrado en la figura del líder, en detrimento de la militancia, que ha pasado a ser un ente molesto para los personalismos reinantes.
Sirva de ejemplo el hecho de que los militantes socialistas de Collado Villalba nos enteramos por la prensa local o al recogerlo en nuestro buzón del famoso libro de los ‘10 años de progreso’, lo que volvió a repetirse días después con la encuesta sobre la intención de voto, cuyos resultados desconocemos, aunque mucho me temo que nunca se nos dé la oportunidad de hacerlo, ya que las elecciones las gana el líder, como él ha manifestado en multitud de ocasiones. Esta manera de entender la política genera una perversión democrática que puede resumirse en la siguiente frase: “Estas conmigo o contra mí”, y cuyas consecuencias han sido que más de la mitad de los antiguos compañeros han abandonado el partido y algunos, fruto de su frustración y supongo de una demencia ideológica transitoria, están recalando en el PP.
El responsable último de todo este cúmulo de despropósitos no es José Pablo, somos todos y cada uno de nosotros, que pudimos y no quisimos poner freno a la inaceptable pretensión de concentrar en su persona el poder político y el institucional, anulando con ello los mecanismos internos de control para impedir la ruina de nuestro partido y de nuestro pueblo en beneficio de unos pocos.