El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
Con la vista puesta en las elecciones municipales y autonómicas de 2010, el PSOE de Galapagar celebró su convención el pasado fin de semana, con dos ejes fundamentales que, a priori, parecen estar en la base de su política: participación y servicios públicos. Sin necesidad de entrar a fondo en el debate, sí resulta llamativa la presencia como ponente del alcalde de Collado Villalba, José Pablo González.
El regidor del vecino municipio acompañó a Gregorio Peces-Barba, ex rector de la Universidad Carlos III y uno de los padres de la Constitución Española, como ponente acerca de la importancia de la democracia y la participación ciudadana, si bien sus actuaciones a lo largo de los últimos años dejan en muy mal lugar sus presuntas aptitudes para hablar sobre este tema. No hay que irse muy atrás para recordar cómo despreció las peticiones que centenares de vecinos realizaron para que la controvertida obra del túnel-parking de Honorio Lozano y Batalla de Bailén, hipotecando el futuro de la ciudad, fuera sometida a una consulta popular. También se extendió el primer edil villalbino al referirse a la imprescindible función del tejido asociativo, si bien aquí se olvidó de redondear su discurso con el ninguneo al que somete a los colectivos críticos con su gestión, caso de ADEC o el propio Foro Social de la Sierra, por no hablar de las últimas declaraciones de su concejala de Cultura respecto al papel desempeñado por los sindicatos en el Ayuntamiento.
Parece evidente que el PSOE madrileño no anda sobrado de figuras de relevancia para intentar el asalto a las alcaldías de la región, y en este sentido el recurso a José Pablo González -que atraviesa el momento más crítico en sus más de 10 años de gobierno- no hace más que subrayar la crisis de ideas y personas que sufre el socialismo en la Comunidad de Madrid, agravada por las numerosas contradicciones en que incurren sus responsables. Como ejemplo, cabe señalar que, justo antes de la intervención del alcalde, se habló de los servicios públicos, haciendo especial hincapié en áreas como la educativa. Precisamente fue en Villalba donde este mismo regidor impulsó la creación de una universidad privada, amén de haber protagonizado un creciente rosario de privatizaciones. ¿Es éste el ejemplo que buscan los socialistas de Galapagar?