Collado Villalba

Los aullidos de Lobo Cojo

INTERINO

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
“Marchando otra de precampaña electoral: JP lloró desconsolamente en Ferraz hasta conseguir que le enviasen a un ministro para poder compartir con él la foto de la finalización de las obras de la calle Real. Aunque, según hemos podido saber, él pretendía la compañía de José Blanco, al final se ha tenido que conformar con Manolo Chaves, un político en declive que tuvo que abandonar su ‘reinado’ de la Junta de Andalucía con cerca de un millón de parados y acosado por la polémica subvención de 10 millones de euros concedidos a la empresa donde trabaja su hija, dice Lobo Cojo. Con estas credenciales, no creo que la visita del vice, ayer jueves, le haya servido de mucho a nuestro fenómeno, obsesionado últimamente en lavar su imagen política, una imagen que él ha ido deteriorando día a día con una gestión totalitaria y narcisista, preñada de grandes dosis de despilfarro, amiguismo y prepotencia que han ido minando la credibilidad de un político que llegó a la Alcaldía presumiento de ser el hijo del churrero del pueblo y que, 10 años más tarde, sólo se deja ver por el municipio en coche oficial (siempre acompañado de su inseparable guardaespaldas), compra en tiendas de marca de Pozuelo o La Moraleja, esquía en Andorra, se aloja en hoteles de cinco estrellas y come en restaurantes de lujo. Y claro, con estos manjares a su alcance, nadie debe sorprenderse de que JP quiera seguir en ‘su’ poltrona. Otra cosa es que lo consiga”.