El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
La tromba de agua registrada la madrugada del miércoles dejó imágenes como ésta, en Villalba, en donde vemos cómo la calle situada entre el cuartel de la Guardia Civil y el polideportivo quedó convertida en una auténtica piscina. Las intensas precipitaciones provocaron que se desbordase el colector situado en esta zona, lo que originó que en la calzada apareciesen numerosos residuos. Además, hubo algunas pequeñas inundaciones de bajos y garajes, así como retrasos en las líneas de Cercanías.