Se aprueba el Plan General de Urbanismo

En la sesión plenaria celebrada por el Ayuntamiento de Collado Villalba el jueves, 21 de diciembre de 2000, se aprobó el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de este municipio. En relación con dicho acto y a título anecdótico, les diremos que cuando el alcalde, José Pablo González, iba a tomar la palabra, un grupo de vecinos se levantó de sus asientos y mostró unos carteles en los que decía: “PGOU, tongo”. El regidor villalbino, visiblemente enfadado, les pidió que abandonasen el salón de plenos porque su reacción le parecía “un insulto a la Corporación municipal”.


Al día siguiente, Diario del Noroeste entrevistó a González sobre este hecho que él ya había calificado como histórico para el municipio. El alcalde comenzó la entrevista haciendo un breve repaso sobre la historia del Plan General: “La primera vez que se empezó a hablar del nuevo planeamiento fue en el año 1990. Hubo un avance en 1992, en la época de Carlos J. López, pero quedó aparcado. Cuando llegó el PP se hizo otra aprobación inicial, pasaron los cuatro años de legislatura y este documento volvió a quedar sobre la mesa, y ahora lo hemos conseguido. Es decir, que este planeamiento llevaba 10 años por ahí circulando y nunca se había materializado en una propuesta concreta y cerrada. Los ciudadanos tienen que saber que muchos de los problemas de infraestructuras y ordenación que existen en nuestro municipio lo son como consecuencia de no tener un Plan General, ya que las Normas Subsidiarias se habían quedado obsoletas”.

Proyectos más importantes
Seguidamente, José Pablo González hizo un repaso sobre los aspectos más importantes del nuevo planeamiento:

• “La moderación en el crecimiento tanto en número de viviendas como en edificabilidad. Hay un cambio de unifamiliar, chalet adosado, al bloque abierto en altura, con zonas verdes, deportivas y calles amplias, que es un concepto más progresista de vivienda”. (A día de hoy, la mayoría de los nuevos desarrollos urbanos carecen de zonas verdes y deportivas. Las nuevas calles y aceras siguen siendo muy estrechas)
• “Disponemos de una captación de suelo público de cerca de un millón de metros cuadrados de los que el Ayuntamiento va a pasar a ser propietario”. (De ser cierto, este patrimonio ha sido ya dilapidado en estos últimos años)
• “Hay planeados varios sistemas generales, es decir, varias expropiaciones convenidas que se han cerrado ya, como en el caso de la Malvaloca, la de la biblioteca municipal en Batalla de Bailén, otra en la calle Ignacio González y en El Gorronal queremos hacer una reserva de suelo que será destinada a un jardín público y a una dotación de tipo educativo-social. Y se introducirán modificaciones en la calificación de algunos terrenos para poder reservar suelo de cara a generaciones futuras y otros se desclasifican para tener parques amplios como el caso de La Chopera (Cerca Montero), que a partir de ahora tendrá la calificación de no urbanizable”. (Malvaloca, después de 10 años, sigue siendo un proyecto; de la biblioteca de la calle Ignacio González, como de otros muchos prometidos por González a los vecinos de El Gorronal, nunca más se supo; las futuras generaciones tendrán que buscarse la vida si quieren disponer de suelo para abordar sus proyectos. En cuanto a La Chopera, el Ejecutivo la tiene ya en capilla para que se construya en ella el futuro hospital)
• “En el apartado de actividad económica existen dos áreas, la de la ITV (Caño de la Fragua) y la de Las Maripis, donde se pretende, a través de un Consorcio con la Comunidad de Madrid, poner a disposición del mercado y atraer industrias y empresas que puedan generar riqueza y puestos de trabajo para nuestros vecinos”. (Los terrenos del Caño de la Fragua están afectados por un contencioso administrativo y el área de Las Maripis, además de no desarrollarse y no llevarse a cabo las expropiaciones anunciadas, ha permitido la especulación urbanística)
• “En materia de infraestructuras el nuevo Plan General contempla calles importantes que necesitan de una reforma integral para mejorar el tráfico. Por ejemplo, la calle La Venta, estrecha y de doble dirección. Esta estrechez tiene que ver con el PGOU porque en el momento en el que se empiece a ejecutar la obra de la biblioteca y de las viviendas aledañas se establecerá un retranqueo que permitirá construir una calle de 12 metros de ancho. Los vecinos del parque de La Coruña se verán beneficiados por la construcción de una avenida que enlazará la carretera de Galapagar con Fernández Soler. También recoge un tercer puente sobre la autopista a la altura del puesto de la Cruz Roja, para enlazar el eje de Las Maripis y la vía de servicio”. (Pues bien, la calle La Venta sigue estando en precario y el nuevo puente sobre la A-6, pagado por Iberpistas, se construyó en otra zona).