El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
Rosario Martín Crespo (en la fotografía superior) es también la responsable de la dirección artística del Real Coliseo Carlos III, actualmente cerrado por obras, por lo que su programación se ha trasladado las últimas temporadas al Teatro Auditorio de San Lorenzo de El Escorial, un espacio que permite la puesta en escena de grandes producciones teatrales como son Urtain o Glengarry Glen Ross. En cuanto al desarrollo de los trabajos, asegura que, “si no se tuerce nada, que no tiene por qué torcerse, estará todo listo para empezar con la temporada de otoño”. “Las obras van perfectamente, aunque siempre con mucho cuidado, porque hay que tener en cuenta que se trata de un espacio protegido y que se trata de una intervención compleja”, explicó. En concreto, la actuación se centra en mejorar la accesibilidad, eliminar las barreras arquitectónicas y mejorar la seguridad, adaptándose a la actual normativa; todo ello respetando escrupulosamente la estructura de este coqueto espacio. Una vez que terminen los trabajos, Martín Crespo señaló que la idea es que se pueda llegar a “un consenso”, de modo que se continúen programando producciones de gran formato en el Auditorio -al margen de los festivales por parte de la empresa encargada de la gestión, en este caso Clece-, mientras que el Coliseo se reserve para espectáculos de corte más íntimo. “Hay que buscar un equilibrio”, subrayó la responsable de la dirección artística de este espacio.