Collado Villalba

La recepción de ‘Montecover’ se debe a una decisión técnica

IZQUIERDA UNIDA ACUSÓ AL EJECUTIVO DE NO PENALIZAR A LA UTE 'ORTIZ COVER' POR SUS INCUMPLIMIENTOS

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
La Junta de Gobierno celebrada por el Ayuntamiento de Collado Villalba el día 3 de diciembre de 2009 aprobó, así lo recogía El Faro del Guadarrama el pasado 15 de febrero, “la recepción de la parcela Caño de la Fragua, Km. 37,200 de la A-6, en base al informe emitido por los Servicios Técnicos del Área de Medio Ambiente y Urbanismo”. En este documento queda reflejado que el 24 de noviembre de 2009 los Servicios Técnicos de Medio Ambiente, junto al arquitecto municipal, Pedro Riveiro, realizaron una visita de inspección a la finca que el Ayuntamiento había cedido a la UTE ‘Ortiz-Cover’ para su ocupación parcial y temporal. En el acta de recepción los técnicos certificaban que el aterrazamiento de los residuos se había consumado “salvo un acopio de grava que en el momento de la visita un operario de Cover estaba procediendo a cargar en un camión para su retirada”, a la vez que hacían constar que “el arbolado se encuentra a nivel de terreno”. Y para mayor gloria, los técnicos informantes fundamentaban sus conclusiones en los estudios topográficos realizados por la empresa Concesionaria Collado Villalba, antes de la utilización de la parcela (abril de 2006) y en noviembre de 2009, “en los que los perfiles longitudinales atestiguan lo observado en la visita de inspección”.

Hasta aquí la peculiar certificación realizada por los ciados técnicos, que difiere sustancialmente con el estado en que se encuentra esta finca, en la que aún se puede apreciar una sensible modificación de sus perfiles longitudinales, el incremento de casi medio metro del nivel topográfico, un grave deterioro del arbolado y la desaparición de algunas encinas, enebros y de otros ejemplares protegidos (ver fotografías tomadas esta misma semana).

Una decisión técnica
El grupo municipal de Izquierda Unida denunció esta polémica recepción en el capítulo de ruegos y preguntas de la sesión plenaria celebrada el pasado jueves, 28 de enero. El edil responsable del área de Urbanismo y Medio Ambiente, Juan José Morales, manifestó que la misma “se realizó con el visto bueno del arquitecto municipal y una técnica de Medio Ambiente, que fueron los que avalaron el informe”, añadiendo que en este asunto “sólo primaba el informe técnico” y que por tanto no era “una decisión política”. Morales también dijo que echaba en falta “que no hablen de la gran labor que se ha hecho en esta finca al reciclarse más de 207.000 metros cúbicos de residuos”, omitiendo que esos áridos fueron vendidos por la UTE ‘Ortiz-Cover’ a otras empresas vinculadas al sector de la construcción.

Ricardo Terrón, concejal de IU, calificó el trato dispensado por el Ayuntamiento a estas mercantiles como “privilegiado, primero porque en abril de 2008 tenían que haber entregado estos terrenos al Consistorio, no lo hicieron y no les penalizaron; tampoco cuando ocuparon más metros cúbicos de los permitidos, y ahora nos entregan la finca sin haber retirado todos los residuos”.

En cuanto al protagonismo dado por políticos a sus técnicos en la elaboración del documento de recepción, cuanto menos irregular, de la finca del Caño de la Fragua, bien podría considerarse como un paso más por parte del Ejecutivo que preside José Pablo González a la hora de eludir responsabilidades, pasándoles la patata caliente a sus personas de confianza -pasó igual en la obra del parking-túnel de Honorio Lozano tras detectarse el absurdo estudio geotécnico realizado por la dirección técnica de la obra, cuyo coste apenas superó los 2.000 euros y que serviría de base para el desarrollo de un proyecto que finalmente ocasionaría para las arcas municipales un sobrecoste de más 20 millones de euros-; unos técnicos a los que, curiosamente, el alcalde defiende públicamente.

Responsabilidades políticas
Suele ser bastante habitual en muchas corporaciones municipales que, cuando pintan bastos, los políticos intenten desmarcarse de sus propios actos, trasladando de inmediato la responsabilidad a los técnicos que han intervenido en el procedimiento, como ha sucedido ahora con la recepción de esta finca. Y esto pasa aunque todos sepamos que la instrucción, decisión y ejecución (fue el propio Consistorio quien aprobó ceder el usufructo temporal del Caño de la Fragua a la UTE Ortiz Cover) siempre corresponde al propio Equipo de Gobierno. Al respecto, un ex técnico municipal, con un gran sentido del humor, quiso mostrarnos la relación de trabajo entre políticos y técnicos con una curiosa vivencia: “El alcalde de un importante pueblo madrileño llamó a su despacho al arquitecto municipal y le dijo: ‘Mire, vamos a cambiar el sentido de la circulación de esta calle haciendo un túnel; vamos a construir un aparcamiento subterráneo en esta otra y crear una rotonda semafórica en superficie. Redacte un informe donde diga que esto es lo mejor para nuestro municipio. Y ya sabe, las medallas me las pongo yo, así que si esto sale mal, la responsabilidad será únicamente suya”.