Los aullidos de Lobo Cojo

“Cuando muchos nos temíamos lo peor, el sol y la lluvia impidieron que en una ciudad con tintes fantasmales pudiera producirse una auténtica tragedia tras la nevada caída durante el pasado fin de semana. Calles intransitables, aceras heladas, ausencia de máquinas quitanieves en la vía pública, numerosos accidentes de tráfico y caídas de peatones incapaces de mantener el equilibrio, etc., etc., etc. ¿Y qué hacia mientras tanto JP? Pues eso, ejercer de encantador de serpientes, un papel que tiene ya muy ensayado, para decirnos que el Plan de Inclemencias Invernales estaba activado y que funcionaba al 100 por 100. Imagínense los improperios vertidos por aquellos que llegaron a leer tan provocador mensaje mientras comprobaban in situ que no podían salir de casa, que sus coches estaban enterrados en la nieve y que nadie acudía en su ayuda, dice Lobo Cojo. Las máquinas quitanieves que presentó el fenómeno en la plaza de Los Belgas para justificar el contrato multimillonario firmado con FCC deben estar junto a las ovejas, los burros y los perros desaparecidos del Coto de Las Suertes, porque de ellos/as nada hemos vuelto a saber. Lo que sí tenemos claro es que Villalba no es Siberia, y por eso resulta difícil entender que en cuanto caen unos cuatro copos de nieve padezcamos algunos problemas que ni siquiera se producen en aquellas estepas rusas. Y no será por dinero, porque con más de 70 millones de euros de presupuesto municipal...”.