Valdemorillo

La alcaldesa se libra del control de las cuentas por el ‘apoyo’ de PV

Varios ediles de la oposición, en una sesión plenaria

PIVALDE ACUSA A LOS DOS CONCEJALES PROGRESISTAS DE COMPLICIDAD POR IMPEDIR LOS PLENOS EXTRAORDINARIOS

Paola F. López | Miércoles 22 de octubre de 2014
La gestión que está realizando el Partido Popular en el Ayuntamiento de Valdemorillo sigue provocando serias dudas entre la mayoría de los concejales de la oposición. Estas dudas se han visto incrementadas en el último año ante los problemas económicos que padece el Consistorio y el continuo oscurantismo de sus cuentas, que estos ediles achacan a la alcaldesa, Pilar López Partida, y a “su interventor accidental”.
Por ello, Pivalde ha intentado hacer uso del derecho de la oposición a pedir la convocatoria de dos plenos extraordinarios anuales antes de que finalizara el año 2009, con el objetivo de controlar la acción del gobierno. Sin embargo, los dos concejales del partido Progresistas de Valdemorillo no han apoyado esta iniciativa.


Para poder convocar estos plenos extraordinarios hace falta la solicitud unánime de los cinco concejales de la oposición. Por ello, desde el mes de noviembre Pivalde mantuvo contactos con el PSOE y con la agrupación Progresistas de Valdemorillo (PV), con el fin de acercar posiciones para poder convocar esta sesión antes de que finalizara el año y obligar así al PP y a su regidora a dar las correspondientes explicaciones.
Controlar a la alcaldesa
La finalidad de la convocatoria del pleno extraordinario, como explica el presidente de Pivalde, Alfonso Redondo, “no era otra que tratar de fiscalizar y controlar la gestión económica de Pilar López Partida y, en particular el endeudamiento del Consistorio. Con el desarrollo de esta sesión se demostraría la falta de transparencia en la gestión y la ocultación de datos que propicia que tanto la alcaldesa como su interventor accidental oculten la verdad de la situación económica del Ayuntamiento”.
La iniciativa contó desde el primer momento con el apoyo total del PSOE, que incorporó dos temas más relacionados con el asunto.
Por el contrario, lamentan desde Pivalde, “los representantes de Progresistas de Valdemorillo han estado dando largas a nuestros intentos para, finalmente, negarse a apoyar la celebración del pleno extraordinario. Debido a la falta de apoyo de los dos concejales de PV, Pivalde y PSOE se han visto impedidos de ejercer esta labor de oposición. De hecho, explica este grupo, la actitud de estos ediles ha impedido “utilizar las posibilidades e instrumentos que la ley pone a su disposición para ejercer la labor encomendada en su día por los vecinos de Valdemorillo. Por culpa de los concejales de Progresistas se han desperdiciado dos plenos extraordinarios y dos muy buenas ocasiones de controlar la gestión del Equipo de Gobierno de Pilar López Partida”.
Cómplices de la alcaldesa
Desde Pivalde consideran que esta actitud de negarse a la fiscalización y al control de la gestión de la alcaldesa “no deja de ser un apoyo indirecto de Progresistas de Valdemorillo a la nefasta acción de gobierno de Pilar López Partida, convirtiéndose, en consecuencia, en cómplices de su gestión”.
La postura de los dos ediles, según indican desde este grupo, sumada a “su modo de trabajar, caracterizado por continuas ausencias e inhibiciones en todos los temas que se debaten plenariamente, facilita todavía más la mala gestión del equipo de Pilar López Partida”, lo que ha hecho despertar ciertas dudas sobre su posición con respecto al PP y a la regidora.
Sin embargo, la actitud del portavoz de Progresistas, Manuel Franco, fue incluso recriminada en un pleno anterior al verano por la propia alcaldesa. Y es que este edil y su compañera, Gema González, pese a sus ausencias y sus “inhibiciones” en la labor de oposición, cobran mensualmente del Ayuntamiento alrededor de 1.000 euros.