Editorial

Una esperada inauguración

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
El teatro auditorio de San Lorenzo de El Escorial se inauguró el pasado lunes por todo lo alto, con un concierto inaugural presidido por los Reyes que ha dado paso a un Festival de Verano de primerísima categoría, con espectáculos como el del Royal Ballet Covent Garden este fin de semana, que promete un lleno absoluto. En las últimas semanas, no han sido pocas las voces que han mostrado su rechazo a este espacio, centrándose en los efectos que puede tener sobre el Monasterio. Es cierto que, desde la zona del Tomillar, la perspectiva del monumento erigido por Felipe II se topa con el cubo ideado para convertirse en referente cultural en el sur de Europa. Dicen que su objetivo era la simplicidad y desde luego huir de una absurda competición con el Monasterio en la que tendría todas las de perder. No está demasiado claro que lo haya conseguido, al menos en primera instancia, porque el tiempo seguramente lo integrará en el paisaje arquitectónico del Real Sitio, como en su día ocurrió con el Guggenheim en Bilbao, el Kursaal en San Sebastián o la polémica pirámide situada a la entrada del Louvre. Tradición y vanguardia pueden convivir sin mayor problema. Es más, a la larga están llamados a actuar de manera complementaria. Tampoco conviene olvidar en este sentido que el auditorio, más que levantarse, se ha excavado. Antes sobresalían en esta zona matorrales, zarzas y un notable abandono. Ahora, el parque de Terreros tiene un gran epílogo en el auditorio, que además debe suponer una revitalización para el comercio y el sector hostelero de San Lorenzo de El Escorial.