LUCES Y SOMBRAS
Los embalses al 50 por ciento - Crisis, paro y pobreza
Manuel J. Ortega | Miércoles 22 de octubre de 2014
La aprobación definitiva del Plan Parcial de Ordenación Urbana del Sector 1.6 “Caño de la Fragua”, publicado en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid el pasado día 6 de noviembre acaba de ser recurrido, vía contencioso-administrativo, por Ecologistas en Acción. La asociación conservacionista, tal como ya habíamos anunciado en nuestro periódico, ha presentado esta semana recurso contra este plan redactado por el Ayuntamiento de Collado Villalba para alquilar esta finca de propiedad municipal cuya superficie asciende a 107.318,71 metros cuadrados en concepto de derecho de superficie, para facilitar la construcción de una gran área comercial. Los ecologistas denuncian en su escrito las amplias irregularidades que aparecen en dicho documento y fundamentalmente la adulteración y tergiversación de los términos y parámetros que el PGOU de este municipio establece como criterios fundamentales de ordenación urbanística para este sector calificado, desde el pasado 16 de julio, de urbanizable.
Según fuentes bien informadas y al margen de otras posibles denuncias, dos asociaciones de comerciantes también podrían acudir en breve al juzgado de lo Contencioso al considerarse afectadas por dicho planeamiento. Se trata de ADEC Villalba Futura y de la Asociación de Comerciantes y Empresarios de Guadarrama (ACEG), cuyo presidente, Antonio Muñoz, ha calificado el hecho de que el Ayuntamiento villalbino esté intentando promover en su municipio la construcción de una gran superficie comercial y de ocio, como “un grave quebranto para el comercio de toda la comarca”, a la vez que criticaba la postura complaciente de los presidentes y directivos de la Federación de Comerciantes y Empresarios de Madrid (FACEM), así como el de la Asociación de Comerciantes de Collado Villalba (CyE) que “incomprensiblemente actúan como si no se hubiesen enterado del asunto, algo insólito si tenemos en cuenta que ellos están ahí para defender los intereses de los comercios a los que representan”
Así, pues, de momento este nuevo proyecto faraónico del alcalde villalbino, José Pablo González, pasa a vía muerta hasta que los juzgados de lo Contencioso no se pronuncien, decisión que obviamente puede ser recurrida y por tanto no llegar a ser firme en varios años.
Con los embalses al 50 por ciento y sin apenas precipitaciones
Pese a encontrarnos en el ecuador del otoño, en la Sierra del Guadarrama sigue sin llover y el nivel medio de nuestros embalses ya ronda el 54 por ciento de su capacidad. Y lo más grave de todo esto es que, de momento, no se esperan precipitaciones en los próximos días y caso de haberlas, según los servicios de meteorología, serán muy débiles, algo bastante ilógico en un mes como el de noviembre que, normalmente, suele dejar bastantes precipitaciones en nuestra comarca.
Aún así, los responsables del Canal de Isabel II han manifestado que no debemos preocuparnos “aunque sí se deben adoptar comportamientos que permitan racionalizar el uso del agua para que no empeore la situación”, más cuando los pronósticos de la Agencia Estatal de meteorología (AEMET) y de la estadounidense CFS han coincidido al anunciar un otoño más cálido de lo normal, con temperaturas que podrían situarse entre 1 y 1,5 grados por encima de los valores medios y con precipitaciones que se mantendrán, en general, dentro de los valores normales. Así pues, habrá que ser cautos y no derrochar el agua porque la cosa no está para tirar precisamente muchos cohetes.
Familias en paro o sin ingresos y autónomos sin trabajo
En la Sierra del Guadarrama, tal como recogía este periódico la semana pasada, el número de parados ha superado la barrera de los 15.000, de los cuales un 30 por ciento pertenecen a Collado Villalba (4.449), donde ni siquiera los casi diez millones de euros que recibió este año el Ayuntamiento vía ‘Plan E’, teóricamente destinados a reactivar el empleo, han servido para reducir la caída del mismo. Es más, Julio Suárez, secretario general comarcal de CC.OO manifestó a El Faro que “incluso había aumentado”.
Pero, lamentablemente, las consecuencias de la crisis no terminan aquí y al incremento de las cifras de parados hemos de unir a decenas y decenas de familias que están ya en el umbral de la pobreza porque, después perder el paro, no disponen de ningún tipo de ingreso y viven, la mayoría de ellos, de las ayudas facilitadas por Cáritas y otras organizaciones no gubernamentales. Tampoco nos podemos olvidar de los autónomos, primeras víctimas de una crisis que ha azotado sobremanera tanto al sector de la construcción como al de servicios, ambos prioritarios para la subsistencia económica de estas pequeñas empresas. Tanto es así que en este último trimestre el número de autónomos en nuestra comarca ha vuelto a descender (3,8 por ciento), con el agravante de que estas familias no tienen acceso a ningún tipo de subsidio.