El alcalde de Torrelodones, Carlos Galbeño, en su despacho del Ayuntamiento (Foto: A.T.)
ENTREVISTA CON EL ALCALDE DE TORRELODONES TRAS EL RECHAZO DE LA COMUNIDAD DE MADRID A LOS PLANES DEL EJECUTIVO EN EL AHN
ENRIQUE PEÑAS | Miércoles 22 de octubre de 2014
El informe negativo de la Comunidad de Madrid a la propuesta del Ayuntamiento de Torrelodones para reclasificar el Área Homogénea Norte (AHN) ha marcado un importante punto de inflexión dentro de esta legislatura, además de suponer una vuelta de tuerca en la gestión del Equipo de Gobierno que preside Carlos Galbeño (PP), quien ya anunció que se buscarían otras alternativas con el fin de mantener la calidad de vida y el nivel de servicios que se ofrecen desde el Ayuntamiento. De todo ello hablamos en la siguiente entrevista.
Tras el carpetazo al AHN, ¿el Ejecutivo está trabajando ya para buscar otras soluciones?
Indudablemente, el desarrollo del Área Homogénea Norte era importante, aunque, como es lógico, dependíamos de los informes de Medio Ambiente, que no han visto viable la reclasificación de esta zona, y por tanto hemos buscado otras posibilidades, que no por nuevas no eran ya conocidas. El hecho de tener un entorno privilegiado y estar rodeado de parques regionales puede ser un freno al desarrollo para un municipio como el nuestro, tan cercano a Madrid, y eso nos hace estudiar soluciones que pueden ser difíciles. Nunca hemos mirado a la construcción, sino que hemos sido respetuosos con el medio ambiente, con un desarrollo sostenible y manteniendo la calidad de vida que impera en este municipio. Siempre hemos buscado salidas a través de sectores limpios, como transportes, turismo, oficinas, servicios a la comunidad, etc. Y por ahí vamos a ir, no es una novedad, pero ahora quizá tendremos que acelerar ese tipo de desarrollo, simplemente por supervivencia. Tenemos en marcha una serie de proyectos de tipo cultural y turístico, buscando que la cultura se convierta en un motor económico, unido a las posibilidades que nos da el entorno. Todo aquello que nos perjudica en nuestro desarrollo normal, también nos ofrece otras oportunidades de cara al futuro que pueden ser muy interesantes. Lo que no pudimos hacer en el AHN lo tendremos que hacer en otros sectores. Hay que buscar salidas, aunque la principal no está en nuestras manos, ni siquiera en las de la comunidad de Madrid, sino del Gobierno de la nación, porque es urgente solucionar el problema de la financiación de las haciendas locales, que hasta ahora se ha olvidado completamente.
Y en cuanto a ese informe negativo, ¿fue especialmente sorprendente o de algún modo lo veían venir?
Ni nos sorprendió ni lo veíamos venir. Esto se ha sobredimensionado a causa de Vecinos por Torrelodones, porque siempre dijimos claro que presentábamos simplemente el Avance de un proyecto. Hemos preguntado a la Comunidad de Madrid si este desarrollo era posible, cumpliendo con lo que establece la ley. Una vez que tenemos esos informes y no se puede actuar, porque ha cambiado la normativa, ya dije que sería el primero en acatarlo. Lo que pasa es que a este partido lo único que le interesa es el Área Homogénea Norte, nada más. No están aquí por el interés general, sino privado, no vaya a ser que les pongan una casa delante de ellos y entonces ya la hemos fastidiado.
¿Y cuándo mantienen que se han perdido seis años y piden su dimisión de las comisiones de Medio Ambiente de la FMM y la FEMP?
En todo caso, esos seis años los ha perdido el pueblo de Torrelodones teniendo que mantener, con el erario publico, los sueldos de estos señores sentados en el pleno del ayuntamiento, porque han demostrado una vez más que lo único que les interesa es su ego personal y su particularismo. No sé por qué esa forma de centrarse en el AHN, y concretamente en mí, cuando hay cosas mucho más interesantes. Aquí mandan son las urnas, que son las que conceden representatividad, pero no pueden ir por caminos extraños poniendo la zancadilla. Y por más que hicieron al final de la pasada legislatura para que el PP, y yo en concreto, fracasáramos, ganamos por mayoría absoluta. Es igual que lo que ocurrió con la bandera verde: creían que me la quitaban a mí, pero no, lo hacían al pueblo de Torrelodones. Lo que es curioso es que pidan mi cese cuando me acaban de nombrar miembro de la Comisión de Urbanismo de la comunidad de Madrid; es decir ,que en ese sentido han aumentado mi responsabilidad representativa, y supongo que por algo será…
Ahora que el Área Homogénea Norte está fuera del debate, ¿qué espera en este último tercio de la legislatura?
Yo creo que se van a radicalizar y van a seguir hablando del AHN. Me gustaría que abordasen otros temas, me harían feliz como alcalde, pero tienen una fijación enorme en este punto. Vecinos por Torrelodones sólo mira su propio ombligo, con un ansia increíble por eliminar al que consideran su enemigo, porque parece que en vez de ser adversarios somos enemigos, y eso no debe ser así. Hay que dignificar la política, porque es un servicio público.
Después de estas dos legislaturas, ¿ha tomado ya una decisión acerca de su futuro político?
Bueno, yo llego a la política después de 40 años de servicio público, a lo que hay que sumar este tiempo. Eso genera una especie de compromiso que está por encima de uno mismo. Si yo no estuviera aquí porque me debo a mis vecinos, hace tiempo que me hubiese ido. Indudablemente, pertenezco a un partido, y no todo depende de mí. Decir lo que voy a hacer sería una falta de respeto para los vecinos, porque lo único ante lo que yo me arrodillo, entre comillas, es ante el pueblo, nada más que ante el pueblo. Podré hablar de mi apetencia o de lo que me gustaría, pero me lo voy a guardar hasta que mi partido decida. A partir de ahí, uno podrá estar más o menos de acuerdo, nada más.
Por otra parte, y si hablamos de proyectos pendientes, ¿qué línea van a seguir estas actuaciones?
En primer lugar tenemos los proyectos del PRISMA, que están en vías de redacción. La creación de un nuevo campo de minifútbol, con un gran aparcamiento; la remodelación de la avenida de la Dehesa, donde se produce un gran número de conflictos de tráfico; la rehabilitación del Palacio de la Solana, que será un museo-biblioteca, la reforma de la Casa de Cultura, que ya era hora, y también de la Casa de la Juventud, que va a ser muy importante; el nuevo alumbrado público en Arroyo Trofas y La Berzosilla; y también las pistas de skate, a ver si las podemos hacer por fin. En cuanto al nuevo Plan E, todavía estamos estudiando los proyectos, aunque en breve ya los podremos presentar para aprobarlos en pleno. Se benefician las áreas que recoge el decreto, en temas medioambientales, nuevas tecnologías y servicios generales, dejando una parte para gasto social.
Comentaba antes que la cultura debe convertirse en uno de los motores económicos del municipio, algo que coincide con la celebración en 2010 del Año de la Cultura en Torrelodones. ¿Se tiene avanzada ya la programación?
El programa cultural está prácticamente cubierto, pero queremos darle un sentido más consolidado, dar a la cultura la importancia que tiene, y más en un municipio como Torrelodones. Y además queremos demostrar que puede pasar de ser un servicio público a convertirse en un sector económico fundamental. Hemos llegado a un nivel en que Torrelodones tiene un gran presupuesto para cultura, y sin embargo no es el más gravoso, porque recuperamos, vía convenios y acuerdos, parte del gasto que tenemos con relación al desarrollo de los programas. El siguiente paso es el desarrollo económico de este sector, y eso hay que unirlo al turismo y a la restauración que tenemos en Torrelodones, que es de primera. En eso estamos trabajando. La Sociedad Caminera, por ejemplo, está realizando un trabajo impresionante, y tenemos un proyecto que vamos a relanzar, que es el del Real de Manzanares. Por otra parte, Torrelodones ha llegado a un punto en que todo ya está muy estructurado. No vamos a aumentar mucho el número de habitantes, y se trata de ir cerrando poco a poco las infraestructuras que no teníamos, además de generar ingresos para mantener y mejorar los servicios.
Hace unos días, en un acto con la Asociación Empresarial, señalaba que Torrelodones se ha convertido en una especie de isla. ¿Cuál es el papel que juega el Ayuntamiento en este sentido?
Estamos llevando una política de apoyo y promoción a los emprendedores y el sector empresarial. Es precisamente la sociedad civil la que imprime carácter y futuro, porque el empresario es el único que puede generar riqueza. El resultado para Torrelodones ha sido extraordinario. En el caso del hospital, por ejemplo, nadie daba un duro por él, teníamos a todo el mundo en contra, pero ahí está. Y en el caso del centro comercial, igual, porque ha generado ingresos para el Ayuntamiento, y además ha dado una gran vida al municipio, porque quien viene a comprar un sábado o un domingo, muchas veces también se queda a comer aquí. Además, todos sabemos que el pequeño comercio tiene un importante grado de rotación, y en un momento como este más bien de paralización; sin embargo, aquí hoy por hoy todavía es positivo el número de comercios que abren sobre el que cierran. Y es que además las últimas estadísticas dicen que está creciendo el empleo. No tenemos sectores agresivos, y por eso no hay carga negativa sobre ellos; si hubiésemos dependido de la construcción, la crisis nos habría afectado más, qué duda cabe.
Y en cuanto a la situación de las arcas municipales, ¿también es menos grave que en otros municipios de la comarca?
Bueno, ahí no podría decir lo mismo, al menos por solidaridad. Vamos saliendo, aunque con dificultades. Podemos ir venciendo las dificultades, pero si me preguntan lo que puede pasar el año que viene, pues no lo sé, porque depende en buena medida de lo que haga el Gobierno central. Estamos en un momento, como en cualquier hogar, en que estamos viviendo el día a día; vamos tirando, que no es poco.