El consejero de Sanidad, Juan José Güemes / C. MADRID
Consejo de Gobierno área única sanitaria
El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid dio ayer luz verde a la Ley de Libre elección en la Sanidad, trasladando esta normativa a la Asamblea para su aprobación definitiva.
Permitirá a los usuarios de la sanidad pública madrileña elegir libremente el médico de familia, pediatra y enfermera en Atención Primaria, así como el médico especialista en la especializada por el que quieren ser atendidos, excepto atención domiciliaria y urgencias.
Con esta Ley, el sistema sanitario público regional se organiza en un Área de Salud Única, integrada por el conjunto del territorio de la región. La libertad de elección, indican fuentes del Ejecutivo autonómico, “permitirá a los ciudadanos no sólo acceder a un servicio que responda a sus necesidades, sino también identificar el grado de calidad del sistema sanitario. Así, logrará reforzar los servicios más demandados y mejorar los que no funcionen tan bien, ya que los usuarios revelarán sus preferencias y los servicios que consideran que deberían mejorar”.
Mediante este nuevo sistema, un ciudadano, por ejemplo, que resida en el distrito madrileño de Moncloa podrá ser atendido en La Princesa, si así lo desea, o un ciudadano que habite en Torrejón de Ardoz y que trabaje en el distrito de Latina podrá elegir un Centro de Salud de este distrito de la capital.
De esta forma, toda la Comunidad de Madrid se identifica con un área única de salud en coherencia con su carácter uniprovincial y sobre esta demarcación se organiza su sistema público sanitario. Los pacientes a los que se prescriba atención especializada podrán elegir libremente médico en cualquier hospital y centro de especialidades de la red pública madrileña.
Para facilitar este derecho, la Comunidad pondrá a disposición de los ciudadanos la información necesaria para que puedan tomar decisiones fundadas y orientadas a la mejor resolución de sus problemas y se habilitarán los medios informáticos y telemáticos precisos. En ambas plataformas se establecerán indicadores de calidad, tiempos de espera asistencial y encuestas de satisfacción de los usuarios. La libre elección ya ha sido probada a menor escala con la apertura de los nuevos hospitales, donde los pacientes tenían la opción de seguir acudiendo a su antiguo centro o acudir al nuevo.