LAS VENTAS
El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
La primera de la Feria del Aniversario en Las Ventas, celebrada el martes 2 de junio, no desentonó de la mayoría de las tardes de la isidrada. Otra corrida aburrida motivada principalmente por el nulo juego de los toros del Puerto de San Lorenzo.
El encierro se compuso de tres toros más finos y tres más fuertes, pero todos bajo el patrón de la mansedumbre, la justeza de fuerzas y la falta de casta. Alguno tuvo mejor son, como el tercero, pero pronto se vino abajo en los primeros compases de la faena. El cuarto fue un sobrero de Antonio Palla, tan noble como blando. El mejor librado de la tarde fue Miguel Tendero, que tuvo la valentía de venir a tomar su alternativa ocupando así la vacante del convaleciente El Fundi.
El toricantano se topó con el toro más manso de todos los lidiados en este mes, que ya es decir. Pegaba arreones y acometía con mucha violencia y aspereza. Tendero le plantó batalla con mando, temple y autoridad. No podían ser más de tres muletazos y el de pecho, pero suficientes para realizar una labor de gran mérito El toro era complicado, pero llegaba mucho al tendido. Tras estocada y descabello, Miguel Tendero dio una vuelta al ruedo y dejó una grata sensación. Comenzó bien la faena al sexto, pero el toro pronto se acabó y al nuevo matador le faltó oficio.
Sebastián Castella ratificó su buen momento, pero no tuvo material para triunfar. Se lució en un buen comienzo de faena ante su primer oponente y en dos tandas de derechazos de mucho ajuste, toreando despacio y con valor. A partir de ahí, el toro echó la cortina y se paró. Con el quinto, el francés lo intentó, pero poco había que hacer. El Cid estuvo desangelado y terminó un San Isidro con un cartel muy a la baja. Su lote fue blando, dejó estar y tuvo pocas opciones, pero al torero se le vio ausente y muy lejos de sus grandes tardes en esta plaza.