INTERINO
El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
“Al margen del esfuerzo realizado por el aparato propagandístico josepablista para intentar convencernos de que JP no fue sacado de las listas al Europarlamento por el PSOE, sino que fue él quien renunció al cargo después de escuchar el mensaje que le envió un ser superior (¿Tomás Gómez? ¿Leire Pajín?...) invitándole a continuar en su puesto para seguir defendiendo los intereses de su pueblo.
Pues bien, después de todo esto, estoy seguro que la mayoría de los villalbinos se han olvidado de este absurdo culebrón, aunque sigan convencidos de que una vez más los voceros de nuestro entrañable faraón intentaron comerles el coco, dice Lobo Cojo. Y si no, ¿cómo se explica que alguien que dice querer tanto a su pueblo no haya tenido reparo alguno a la hora de hipotecarnos durante los próximos 40 años después de apadrinar la absurda e innecesaria obra del túnel-parking de Honorio Lozano? ¿O cómo es posible que este mismo personaje siga manteniendo en nómina a los cargos de confianza que él colocó a dedo y a misteriosos asesores verbales a los que nadie conoce? A los villalbinos les importa un pepino que JP se vaya a Bruselas o se quede, porque tienen otras preocupaciones mucho más importantes, cómo saber si mañana van a poder pagar la hipoteca de su piso; cuánto tiempo van a poder conservar su puesto de trabajo; si les van a bajar los impuestos o qué hacer para que sus hijos consigan plaza en una guardería pública”.