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El Pozuelo también gana al CUC Villalba (1-3)

FÚTBOL / Tercera División Grupo VII – 40ª Jornada

Los amarillos perdieron en el duelo de colistas su penúltima ocasión de brindar a sus aficionados un triunfo casero

JAIME FRESNO | Miércoles 22 de octubre de 2014
El penúltimo clasificado también encontró el terreno abonado para sumar tres puntos en la Ciudad Deportiva. El Pozuelo ganó al CUC Villalba 1-3, en el choque adelantado a la 40ª jornada en Tercera, disputado el jueves 30 de abril, sin necesidad de ser mejor. Fue uno de tantos ganadores por oficio de los que han pasado por la Sierra durante una temporada que, felizmente, ya toca a su fin. Pronto, a los 23 minutos, un inspirado Fer estableció el 0-1 con un remate cruzado que batió a Roberto por el palo largo. El CUC Villalba perdía a las primeras de cambio sin haber cometido más pecado que el de no meterle más ritmo al partido, ante un Pozuelo expectante y tranquilo en el que Mino estuvo a años luz de su exhibición ante el Getafe B en la víspera. El CUC Villalba pareció tener más fútbol, y sobretodo una referencia válida en su capitán Raúl, de cuyas botas partieron las jugadas más sustanciosas. El canterano fue el alfa y el joven Mendi pudo ser el omega, pero el cadete no pudo añadir la definición en el remate a su repertorio de desmarques y buenas maneras en el juego sin balón. Mendi tuvo el 1-1 en el minuto 27, pero solo ante Salva le falló el control a balón servido desde la derecha por Niko. Y sólo siete minutos después, el portero le sacó un encare en la jugada que precedió al tanto de Iván Alonso para el 0-2, otro gol de los que retrata la endeblez defensiva general de un equipo. El CUC Villalba pudo al menos responder a un mazazo que pareció definitivo con una de las pocas armas de Tercera División que atesora, las subidas de De Loma al ataque. En una de ellas, al filo del descanso, el central de San Fernando ganó un balón por alto con un cabezazo que superó al portero y que Dani empujó bajó palos. El 1-2, en la última jugada del primer tiempo, dio unas esperanzas de remontada que saltaron hechas añicos con el fallo garrafal del portero Roberto en la jugada del 1-3. Ese gol, más la decisión de Torres Carrión de no señalar un claro penalti sobre Mendi 20 minutos del final acabó con la penúltima esperanza amarilla de sumar un triunfo casero esta temporada, ése que ya sólo podrá lograr ante el Vallecas en la última jornada.