Tradicionalmente, las niñas visten de blanco, color que simboliza la pureza / ARCHIVO
SOCIEDAD LAS FAMILIAS TENDRÁN QUE HACER FRENTE A GASTOS DE MÁS DE 3.000 EROS ENTRE TRAJES, , BANQUETES Y RECUERDOS
El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
Una de las grandes celebraciones familiares en nuestro país es el día de la Primera Comunión, que es cuando los niños reciben el sacramento de la eucaristía por primera vez. Este acontecimiento religioso se espera con gran ilusión por lo niños -de unos 9 años- y sus familias. Para recibir la Primera Comunión es necesario que hayan recibido previamente el bautismo, requisito que no siempre se cumple, pero que se solventa siendo bautizado días antes.
El futuro comulgante además debe acudir a una especie de cursillo, conocido como catequesis, que puede durar uno o dos años, según el lugar de residencia. El curso es ofrecido por la Iglesia y puede llevarse a cabo en la parroquia o en la escuela del niño. Los pequeños aprenden los valores cristianos y también algunas oraciones básicas. Concluido el curso, reciben el sacramento de la confesión y así estarán preparados para participar de la eucaristía. Para los niños y su familia, así como para la iglesia, la Primera Comunión es un motivo de fiesta. El mes de mayo es el elegido para esta celebración, si bien en algunos casos se adelanta a abril. Las familias que este año se ven inmersas en la organización de esta celebración de carácter familiar van a tener que hacer frente a un importante desembolso económico que en estos momentos puede suponer un gran trastorno a sus economías. Entre el vestido y los complementos para el niño y el resto de la familia, fotos , recordatorios y la comida en el restaurante, el gasto puede rondar los 3.000 ó 4.000 euros.
Un consejo a tener en cuenta es que este acontecimiento no es una boda, por lo que no conviene que el número de invitados sea muy numeroso, con el fin de que el protagonista, que es el niño, esté en un ambiente familiar y de confianza.
El traje de Comunión
La Iglesia recomienda sencillez y moderación en la ceremonia de la Primera Comunión. Tradicionalmente, las chicas suelen usar vestido blanco, color que simboliza la pureza; y los chicos van con traje de marinero, ya sea almirante o el tradicional. En cuanto al femenino, lo habitual son los de seda u organza con jaretas y bordados, nos informan en Modas Yoryi.
Algunas iglesias piden el traje de monja para las niñas, aunque esta costumbre está cayendo en desuso. Un vestido sencillo puede costar unos 300 euros, dependiendo de la tela y los adornos. Entre el traje, los zapatos, peinados, y demás complementos, la vestimenta de 150 (niños) a 500 euros (niñas). En todo caso se debe tener en cuenta que elegancia y sencillez es la norma a tener en cuenta, señala la propietaria de este establecimiento villalbino, que lleva 29 años vistiendo a niños y niñas de Comunión y también a sus acompañantes. Su experiencia puede ser muy útil a la hora de ayudar a elegir el modelo que más favorezca al niño, así como los complementos más apropiados. Además, disponen de los mejores patrones, tanto en diseños modernos como los más tradicionales de jaretas. Otra alternativa al traje de ceremonia es el vestido de calle, que cuenta con la ventaja de que luego se puede seguir utilizando. A esto hay que añadir los complementos, desde chaquetas a zapatos, tocados, corbatas, camisas, cruces, rosarios, cancanes y un largo etcétera.
recordatorios,
regalos y reportajes fotográficos
Otras costumbre muy extendida en estas celebraciones es repartir recordatorios y otros detalles a los invitados, en las que se indican el nombre del niño comulgante, la fecha y el lugar de la celebración. Estos productos han ido evolucionando y en la actualidad podemos encontrar gran variedad de diseños en el mercado.
Es también frecuente ofrecer regalos a los niños. Los más habituales son un reloj, un rosario, una biblia, un álbum para las fotos, una cadena de oro, un crucifijo, máquinas fotográficas o un diario. Pero actualmente, las nuevas tecnologías han ampliado los obsequios, situándose las consolas y juegos entre los preferidos.
Y no podemos olvidar del reportaje fotográfico. Las fotos y el vídeo de la celebración son un buen recuerdo de este día. Es habitual que la iglesia contrate a un fotógrafo para realizar las fotos, a fin de que no se produzcan aglomeraciones en el templo.