INTERINO
El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
“Aunque el cuerpo me pida coger la zambomba e irme por ahí a cantar villancicos, el ambiente que se respira en nuestra ciudad no invita precisamente al jolgorio. Soy consciente de que estamos en Navidad y que en apenas 24 horas tendría que desbordarse la alegría para recibir el nuevo año. Pero eso sólo es una utopía, porque a priori el que más o el que menos ya sabe que 2009 va a pintar bastante negro. Y como ya suele ser habitual en estos estados de crisis, los poderosos se aprovechan para hacer de las suyas. Y si no que se lo pregunten a Chus, esa trabajadora del Ayuntamiento a la que los subordinados de JP acaban de poner en la puta calle por haber cometido el pecado de dedicar los 17 años de su vida laboral a hacer feliz a los mayores de este pueblo, aunque oficialmente le culpen a ella del despido por no superar el examen convocado para cubrir dicha plaza, algo que incluso yo podría admitir si no fuera por los antecedentes que tiene nuestro Consistorio en algunos temas relacionados con el área de Personal (ingresos, despidos, empleos a dedo, etc.), donde el pucherazo ha estado a la orden del día. ¿O acaso alguien se explica el despido de la secretaria de JP tras denunciar un presunto acoso sexual por parte de una asesora de la Alcaldía? ¿Y qué me dicen de la persecución a la que son sometidos otros empleados municipales por el hecho de no reír las gracias a algunos miembros del Ejecutivo? Con este panorama, dice Lobo Cojo, uno no tiene el cuerpo para muchas juergas”.