La formación adquirida para el uso del DESA hizo posible una rápida y adecuada atención determinante hasta la llegada de los servicios sanitarios.
El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
La rápida y adecuada intervención de dos agentes de la Policía Local de Guadarrama, en la utilización del equipo portátil de desfibrilación cardiopulmonar con el que cuenta la unidad, ha conseguido salvar la vida de un vecino que sufrió una parada cardiaca. Los agentes respondieron con celeridad a una llamada efectuada a través del 112, el pasado viernes, en la que se ponía de manifiesto la necesidad de atención urgente de una persona que se encontraba tirada sin conocimiento en la calle. La patrulla se trasladó hasta el lugar con el equipo portátil, comprobando que el enfermo se encontraba en estado de inconsciencia, sin pulso y sin respuesta a estímulos. Efectuaron las maniobras necesarias para la primera atención del vecino, al que lograron sacar de la parada y estabilizar hasta la llegada de los servicios sanitarios que, aunque no se demoraron, reconocieron la importancia de esta primera atención para salvar la vida del hombre.
Los policías contaban con la formación necesaria para el uso del desfibrilador tras recibir un curso que habían solicitado voluntariamente a la Concejalía de Sanidad a través de la campaña “Guadarrama cardioprotegida” iniciada en el mes de mayo.
Una formación profesional y adecuada que pone de manifiesto la implicación de los agentes en la asistencia a los vecinos, puesto que este tipo de conocimientos se imparte fuera de horas de trabajo y con carácter voluntario.
Como se recordará Guadarrama cuenta con cuatro equipos portátiles, cuatro desfibriladores cardiopulmonares, que permanecen ubicados en el Polideportivo municipal y en las dependencias de la Policía Local y para su uso se ha formado a un total de 14 empleados municipales, de diferentes departamentos, de los que 7 son agentes de la Policía Local.
La campaña “Guadarrama Cardioprotegida” está destinada a la mejora en las condiciones de atención sanitaria a los vecinos y vecinas de la localidad no sólo a través de la prevención, sino garantizando una atención rápida, efectiva y profesional en casos de necesidad y está previsto, para los próximos meses, ampliar el número de personas formadas en el uso de los desfibriladores.