Galapagar

El PSOE acusa al Ejecutivo de “confundir a los vecinos”

Carmen Toledano (Foto: ARCHIVO)
Redacción | Miércoles 22 de octubre de 2014
El PSOE ha acusado al alcalde de Galapagar, Daniel Pérez, de “jugar a la demagogia y confundir los datos, con el beneplácito de la Plataforma de Vecinos”. “No es necesario mentir y confundir a la ciudadanía. Los que hasta ahora estaban todos los días pidiendo transparencia, nos están demostrando que desde hace tan sólo un mes han cambiado esa transparencia por la opacidad, la falsedad y la confusión”, señala la ex regidora, Carmen Toledano.

En este sentido, los socialistas aseguran que no se ha reducido el número de personas de confianza, señalando que se ha pasado de dos a tres. Entre ellas añaden, figura como asesor del alcalde el que fue número uno de la candidatura del PP, Pablo Gómez.

El PSOE también cuestiona la eliminación de la partida del concejal de la oposición, aunque de hecho ésta nunca había llegado a ejecutarse, a pesar de que se presupuestaba desde hace años.

En cuanto a la reducción del sueldo del regidor, afirman que se trata de una decisión “loable”, pero añaden que, en el sueldo neto, la diferencia con la ex regidora es de 171 euros. Finalmente, este grupo, ahora en la oposición, indica que la congelación de los salarios de los concejales ya fue llevada a cabo por el cuatripartito en diciembre del 2007. “Así que en éste apartado, tampoco nada nuevo”, concluyen desde las filas socialistas.

“Un montaje publicitario”
Tras la firma hace unas semanas de un convenio con el consejero de Inmigración, Javier Fernández-Lasquetty, el PSOE asegura que el acuerdo ya había sido aprobado por la entonces alcaldesa, Carmen Toledano, a finales de septiembre. Atendiendo a esto, el grupo socialista indica que el acto que tuvo lugar la semana pasada es “un montaje publicitario que se corresponde con la estrategia y la ambición incontrolada de quien hoy preside la Corporación. Este ciudadano, docto en manipulación política y prepotente en ejercicio, entiende que su carrera y su gestión deben desarrollarse buscando obsesivamente la publicidad de sus actos, glorificando sus pretendidos méritos, ejercitando la más irresponsable demagogia e incurriendo en comportamientos cívicos, políticos e institucionalmente incorrectos”.