Agencias | Miércoles 22 de octubre de 2014
El Congreso de Diputados de la Nación les ha exigido a 67 de sus miembros que expliquen sus ingresos con el fin de corroborar que su actividad privada es compatible con el puesto.
Al no poseer la capacidad para indagar la veracidad de la información brindada por cada uno de los funcionarios, el Congreso sólo puede exigir que estos aclaren su situación si se considera que haya errores u omisiones.
En primer lugar, los diputados deben solicitar autorización expresa para poder practicar cualquier otra actividad al margen del Congreso, con limitaciones como la de no contratar ni recibir ingresos de las administraciones públicas, estatales, autonómicas o locales. Los únicos que se encuentras exceptuados de estas limitaciones son aquellos Diputados que ejercen la función de profesores universitarios.
De las declaraciones originales, la Comisión del Estatuto del Diputado ha solicitado aclaraciones a 67 funcionarios por diferentes razones. Varios de ellos porque la Cámara no tiene constancia de que hayan pedido a la Administración pasar a la situación de servicios especiales, y los otros por haber informado que participan en tertulias en medios públicos pero no han acreditado que no reciben dinero por esa actividad.