Redacción | Miércoles 22 de octubre de 2014
La localidad madrileña de Villanueva del Pardillo puso el broche taurino al año 2008 con la celebración de la última feria de la Comunidad de Madrid. Se celebraron dos novilladas, una picada y una de promoción. En la novillada sin picadores inaugural del viernes 17 de octubre, la plaza se cubrió en un tercio de entrada. Se lidiaron cuatro erales serios y con cuajo de Benito del Peral, que en general dieron un juego deslucido y sin raza.
Una oreja por coleta pasearon los dos integrantes del cartel: Alberto Escobar, de la Escuela de Madrid, y Víctor Barrios, de la Escuela de El Espinar (Segovia).
Escobar, que paseó un trofeo en un novillo y fue ovacionado en el otro, demostró un bien aprendido oficio y una depurada técnica que hace que pronto pueda dar el salto a las novilladas picadas. Idéntico balance para Víctor Barrios, que estuvo muy variado en los tres tercios, se mostró bullidor y con muchas ganas de agradar.
El festejo más importante de esta miniferia de San Lucas en Villanueva del Pardillo tuvo lugar el domingo 19, con la celebración de una novillada con picadores en la que se lidió un encierro de Antonio San Román que en general resultó manso, apagado y con muy escaso fondo. Le faltó casta y bravura a una divisa que peca de estas dos esenciales virtudes. El balance de la terna no fue excesivamente triunfalista. Paco Chaves fue el triunfador numérico del festejo tras cortar una oreja a cada uno de sus novillos por dos trasteos voluntariosos. Una oreja fue para el madrileño Juan Manuel Jiménez, tras una faena enfibrada y con pases de buena factura sobre ambas manos y dejando un buen sentido del temple. Finalmente, una oreja sumó Alejandro Parralo tras una labor aseada y poco firme.