Felipe Huelva frena la euforia en vísperas de la visita del colista a Villalba (Foto: EL FARO)
JAIME FRESNO | Miércoles 22 de octubre de 2014
El CUC Villalba recibe este domingo -Municipal, 12:00 horas- al tercer equipo del Atlético de Madrid, el Aviación, en plena espiral de euforia tras vencer a domicilio (0-1) al Getafe B, líder de la Tercera División hasta la jornada pasada. Al equipo de Felipe Huelva le sigue costando ver puerta, pero la rentabilidad de cada uno de sus goles está fuera de toda duda: lleva siete y suma 12 puntos. La firmeza defensiva que empieza en el portero Toni, inconmesurable ante el filial azulón, y se prolonga en la línea de cuatro, Valenzuela, César, Galán y De la Fuente, está llevando en volandas a los amarillos hasta la zona noble de la clasificación. Cuando Yaco transformó en Getafe el golpe franco del 0-1, minuto 18, ya se vislumbraba que el equipo podía sacar una buena cosecha ante el líder, pese a que sobre el campo no estaban ni Joaquín ni Ángel, la delantera titular. Entre la defensa y Toni abortaron lo poco que pudo generar el Getafe B en ataque.
Ante el colista
El Villalba que ganó al líder va a recibir al colista, un Aviación hundido tras cinco derrotas consecutivas, aunque Felipe Huelva avisa: “Ojo con el Aviación porque el otro día le ganaba 2-0 al Ciempozuelos con nueve jugadores”. Ese partido acabó 2-4, pero el mensaje es claro y ya repetitivo. “Son un rival más y yo no miro la tabla. No hay que sacar los pies del tiesto”.
El técnico sólo tiene la baja de Joaquín, al que le quedan dos semanas para restablecerse de su lesión de hombro, para afrontar un partido que puede poner al Villalba a las puertas de la zona de play-off. Y ningún jugador de la plantilla se puede dar como titular de antemano, visto lo ocurrido con Ángel en Getafe. “No jugó porque decidí que había otros futbolistas más adecuados. Yo soy el que veo como entrenan y, desde luego, no me va a temblar el pulso”.
El Atlético Aviación llega a Villalba con la directiva del Atlético de Madrid planteándose la continuidad del técnico, Manolo Romero, tras uno de los peores arranques ligueros en la historia reciente del filial rojiblanco en Tercera División.