Opinión

La moción de censura de Galapagar, en la recta final. La privatización de los hospitales, a debate - Políticos serranos en la Ejecutiva del PP

LUCES Y SOMBRAS

Manuel J. Ortega

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
Todo parece dispuesto para que el próximo martes, 30 de septiembre, a las 12.00 de la mañana, en el salón de actos del Ayuntamiento de Galapagar se vote la moción de censura presentaba la pasada semana por Plataforma de Vecinos y Partido Popular contra el Ejecutivo que preside la alcaldesa Carmen Toledano. Y, también, todo parece estar atado y bien atado para que de esa sesión salga investido como nuevo regidor de esta localidad el hasta ahora portavoz del grupo municipal popular, Daniel Pérez. Bien, hasta aquí la lógica de las matemáticas, ya que entre PP y la Plataforma suman 11 acreditaciones, y eso en un consistorio compuesto de 21 concejalías es mayoría absoluta. Sin embargo, y con esto no quiero que nadie me tache de aguafiestas, también podría ocurrir que alguien se pusiera enfermo minutos antes de la votación (concejalas en estado avanzado de embarazo creo que no hay) o que entre los nueve ediles populares haya alguno que no esté de acuerdo con el contenido del pacto o la forma de suscribirlo en Madrid entre Granados y los dos representantes de la Plataforma, Luis Remacha y Antonio Rodríguez, sin consultar previamente con los dirigentes del PP local. Y esto no es que yo me lo invente, ¡Dios me libre!, sino que lo he escuchado en algunos corrillos del pueblo donde, como es fácil comprender, el tema está en boca de todos. No obstante, creo que por encima de cualquier enfado o berrinche está la disciplina de partido y por eso los nueve concejales del Partido Popular van a estar presentes en dicho acto para votar favorablemente la moción. Mucho más complicado sería arriesgarse a predecir cómo serán en un futuro más o menos inmediato las relaciones entre estos dos nuevos socios políticos que parecían haberse jurado odio eterno (no olviden que Remacha y Rodríguez han estado presumiendo hasta hace poco tiempo de ser ellos los que habían mandado a los bancos de la oposición al PP, y que fue precisamente la Plataforma de Vecinos de Galapagar la que más empeño puso a la hora de formar con PSOE, Activa y Foro Verde un gobierno a cuatro bandas para dejar fuera a los populares). Pero como en política puede pasar de todo -el poder mueve montañas-, hasta es posible que de este noviazgo consumado deprisa y corriendo en Génova salga un buen matrimonio. Si es así y con ello se beneficia el municipio, felicidades, porque todos sabemos la grave situación económica por la que atraviesa el Ayuntamiento galapagueño.

El hecho de que los cuatro nuevos hospitales que van a ser construidos en nuestra región durante la presente legislatura sean de gestión privada (entre ellos el de Collado Villalba), tal como anunció el consejero de Sanidad, Juan José Güemes, el pasado martes durante la presentación del Plan de Infraestructuras Sanitarias 2007-2011, ha levantado numerosas críticas por parte de los dos partidos políticos de izquierda (PSM-PSOE e IU), centrales sindicales (UGT y CC OO) y distintas plataformas y colectivos vecinales.

La portavoz socialista del PSM, Maru Fernández, calificó este proyecto de “oscurantista”, por haber sido presentado en el mes de agosto, pidió que se aumente el plazo para hacer alegaciones y añadió que los socialistas madrileños no están dispuestos a permitir la entrada de la empresa privada en estos centros, porque cuando ésta interviene “lo hace en perjuicio de la salud de los ciudadanos”. Por su parte, Gregorio Gordo, coordinador de IU en la región, denunció la postura del alcalde villalbino, José Pablo González, por su connivencia con el PP en el asunto de los terrenos ofertados por el Ayuntamiento a la Comunidad de Madrid para construir el hospital, calificando de inconcebible que se quiera ubicar el mismo en una zona especialmente protegida. En cuanto a la privatización de la gestión de dicho centro, Gregorio Gordo dijo: “La cesión de suelo público para la iniciativa privada no sorprende tanto cuando gobierna el PP en los ayuntamientos, pero cuando lo hace el PSOE resulta lamentable”.

Y ante toda esta avalancha de críticas, al regidor socialista y también miembro de la Ejecutiva del PSM, José Pablo González, sólo se le ocurre decir: “No he seguido el pensamiento ni las ideas socialistas porque lo que yo quería era traer un hospital a Villalba. Esperanza Aguirre me dijo: Esto es lo que hay, lo tomas o lo dejas”. Pobrecito, ¿nos lo creemos?.

En la nueva Ejecutiva surgida tras la celebración el pasado fin de semana del XIV Congreso Regional del Partido Popular aparecen cuatro políticos vinculados directamente con la Sierra del Guadarrama. Este es el caso de José Luis Fernández Quejo, diputado regional y alcalde de San Lorenzo de El Escorial; José Ignacio Fernández Rubio, ex alcalde de Guadarrama y actual viceconsejero de Empleo de la Comunidad de Madrid; Ignacio González Velayos, diputado regional y responsable del área de Urbanismo en el Ayuntamiento de El Escorial que, a partir de ahora, se hará cargo de la Secretaría del Área de Comisiones de Estudios, dependiente de la Secretaría Ejecutiva Sectorial de la que es responsable Ana Botella. El cuarto integrante de esta nueva Ejecutiva es el actual consejero de Transportes, Ignacio Echeverría, que desde hace bastante tiempo tiene fijada su residencia en nuestra comarca y, además, preside la junta gestora del Partido Popular de El Escorial.

Es evidente que la Sierra del Guadarrama va a estar durante los próximos cuatro años muy bien representada en este órgano de gobierno de los populares que preside Esperanza Aguirre, una admiradora confesa de nuestra comarca.