Arancha Ortega | Miércoles 22 de octubre de 2014
Un bebé de diez meses murió asfixiado la semana pasada en Galapagar, informó la comandancia de la Guardia Civil. Según las primeras pesquisas, el pequeño se ahorcó de forma fortuita cuando jugaba con la cuerda de un estor.
Según las investigaciones realizadas por los miembros de la Benemérita, se cree que el bebé se despertó de la siesta y al incorporarse alcanzó alguna cuerda del estor próxima a su cuna y al jugar con ella se produjo este fatal desenlace.
El niño fue trasladado al centro de salud de Galapagar donde los médicos de turno solo pudieron certificar su fallecimiento.