Principios poco éticos

Como no podía ser de otra manera, y como cabía esperar, han tenido que llegar las vacaciones estivales en su periodo álgido para que el Ayuntamiento de Collado Villalba, con su alcalde, José Pablo González, a la cabeza, y la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, se pongan de acuerdo para sacar adelante el periodo de exposición a información pública -para que la sociedad serrana pueda alegar y hacer las observaciones pertinentes- del estudio de impacto ambiental y proyecto técnico de la construcción del hospital comarcal en el término municipal de Collado Villalba y que dará servicio a la Sierra del Guadarrama, como habían determinado de antemano ambos, en el lugar conocido como la Chopera.

De este modo nada ético, y con esa forma de entender y aplicar los principios democráticos de participación social en la adopción de medidas políticas con trascendencia social y medioambiental, pretenden aprobar el proyecto de destrucción del entorno natural de la citada arboleda, puesto que a nadie se le escapa la perversidad que supone el hecho de la interposición del intervalo de información pública en el periodo menos propicio para el conocimiento real del estudio del impacto ambiental y para la participación de la sociedad serrana, a través de la remisión de propuestas alternativas totalmente viables al órgano evaluador de los daños ecológicos a producir. Justo cuando llega la hora de descansar de un ajetreado año laboral y disfrutar de los placeres de la vida, siempre teniendo puesta la mirada temerosa en la incertidumbre futura que nos arrostra al inicio de la incipiente crisis económica. Todo medido y calculado lo tienen las personas que están auspiciando este proyecto y que de ninguna de las maneras (al menos esa es nuestra opinión), se puede calificar su conducta como honesta, y mucho menos democrática.

Pero de todas maneras, aún así y con todo ello, están reconociendo de modo implícito la importancia de los males medioambientales y sociales que va a acarrear el proyecto de construcción del complejo sanitario en ese lugar, puesto que desde el inicio del procedimiento se han visto obligados a realizar un estudio de impacto, algo que sin embargo no han realizado en la M-501 (carretera de los Pantanos), trayecto de mucha más importancia en cuanto a biodiversidad. Y lo decimos además con convencimiento propio, pues hemos tenido conocimiento del retraso y pequeña demora en la confección del Estudio de Impacto Ambiental, pues el equipo redactor de éste se ha visto en la necesidad de corregir al paso y completar el paupérrimo y chapucero anexo del estudio forestal, en cuanto a la calidad técnica, inserto éste en el Informe de Idoneidad Medioambiental del Ayuntamiento de Collado Villalba, y del que naturalmente bebe el primero, sirviendo como referencia en cuanto a las líneas estratégicas a desarrollar, de ahí que denominen la memoria como una Actualización del Estudio de Impacto Ambiental