Reclaman un reconocimiento público a la figura de José Tomás

Si hay un embajador de Galapagar en el mundo, ése es José Tomás. Pocos se atreverían a ponerlo en duda. A ello se unen los múltiples reconocimientos recibidos por el torero, desde el Premio Paquiro a la Medalla de Oro de las Bellas Artes.

Sin embargo, en su localidad todavía no ha recibido un homenaje, y por este motivo la Peña Taurina José Tomás de Galapagar, y también la de Madrid, exigen ahora que se lleve a cabo este merecido reconocimiento, para lo que han remitido una carta a la alcaldesa, Carmen Toledano, que a continuación reproducimos íntegramente: “Desde hace tiempo nos venimos preguntando por qué no se ha hecho en nuestro municipio un reconocimiento a la figura de José Tomás. Ya en el año 2000, la Peña hizo un escrito en este mismo sentido dirigido al entonces alcalde, don Manuel Cabrera.

Nunca nadie ha llevado con tanta honestidad y orgullo por todo el mundo el nombre de Galapagar.

Ha sido y es noticia en prestigiosos medios de comunicación extranjeros, como New York Times (Estados Unidos), Le Figaro (Francia), Reforma (México), Radio Caracol y Caracol TV (Colombia), La República (Perú), El Comercio (Ecuador), etc. En todos estos medios, el nombre de José Tomás está directamente unido al de Galapagar. José Tomás se ha convertido en uno de los españoles más conocidos internacionalmente. Un hecho destacable es el apodo para el maestro en México; El Príncipe de Galapagar, así nombrado desde 1995 por el periodista Guillermo Leal, siendo constante noticia en medios mexicanos. Como curiosidad, escribiendo en el buscador Google “José Tomás, el Príncipe de Galapagar”, aparecen cerca de 30.000 resultados, lo que da una idea de la indudable expansión del nombre de nuestro municipio gracias a José Tomás.

Señora alcaldesa, recientemente le ha sido entregado el Premio Paquiro (que ha donado íntegramente a la Fundación Síndrome de Down), por la labor más importante realizada durante el año 2007. El próximo mes de octubre recibirá de manos de Su Majestad el Rey, y a instancias del Ministerio de Cultura, la Medalla de Oro de las Bellas Artes. Y ustedes, que son más cercanos, como Ayuntamiento de Galapagar, no han reconocido aún al diestro como el mejor embajador del municipio en todo el mundo.

Aprovechen la ocasión y hagan lo que tenían que haber hecho hace tiempo: dedíquenle un monumento, el nombre de una calla, o procedan a su nombramiento como hijo predilecto de Galapagar. Se lo pedimos los galapagueños. Nada más merecido. No esperen más”.