Luces y sombras
Manuel J. Ortega
El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
El año que aún falta hasta la celebración de las próximas elecciones municipales (mayo de 2007) va a ser bastante pródigo en el viejo ejercicio de manipular la información, una información que algunos van a intentar hacer llegar al ciudadano envuelta en matices siempre favorables a sus candidatos o a unas siglas determinadas (no importa su ideología) que garanticen la defensa de sus intereses. En Collado Villalba, por ejemplo, los más osados ya han salido a la palestra para intentar comernos el coco a través de una encuesta que, al parecer, vamos a conocer por capítulos, como si de tratase de un serial televisivo, centrándose el primero de ellos en el tema de la remodelación de las calles Honorio Lozano / Batalla de Bailén. Bien, en relación con este tema nos dicen que casi un 70 por ciento de los villalbinos está de acuerdo con este macroproyecto, que la mayoría lo conoce y, además, que va a solucionar de por vida el problema del tráfico y el aparcamiento en esta zona del municipio. Obviamente, el formulario de preguntas pasa de tratar sobre su coste económico -más de 3.000 millones de pesetas-, o de las molestias que esta obra pueda generar a vecinos y comerciantes, ni tampoco del estudio de otras opciones más modestas pero menos lesivas para las arcas municipales. El objetivo estaba claro: a 24 horas de la convocatoria de una manifestación de vecinos organizada por los tres grupos de la oposición, había que disuadir a estos y para ello había que decirles que estaban equivocados porque “todo el mundo está de acuerdo con el proyecto propuesto por el Ayuntamiento”, incluidos -se supone- los 2.700 firmantes del documento donde se pedía la paralización de las obras hasta que se convocara un referéndum. Esta encuesta ha sido encargada por un semanario local cuya línea editorial se basa en defender a ultranza la gestión del Ejecutivo que preside José Pablo González, de ahí que no nos haya sorprendido que la elaboración de la misma se le hayan encomendado a la empresa Synovate, la misma que recientemente hizo otra para el Partido Socialista de Madrid (15-05-2005), donde se asegura que Esperanza Aguirre va a perder la mayoría absoluta en los próximos comicios, además de otros sondeos para mandatarios socialistas como José Bono (28-04-2003), cuando aún era presidente de Castilla-La Mancha; Chaves, (noviembre de 2004) y Pascual Maragall, por citar algunos. Precisamente en una página de Internet, donde se analiza la encuesta que anuncia la presunta pérdida de la mayoría absoluta por parte de Esperanza Aguirre, se puede leer que “Synovate en realidad cuenta con la misma gente que lleva años haciéndoles las encuestas electorales al PSOE, y que fueron absorbidos por esta empresa multinacional hace unos años”. Curioso ¿verdad?, pero aún lo es más el hecho de que un semanario local que no disimula su condición de projosepablista (que no es lo mismo que decir prosocialista), encargue una encuesta a una empresa multinacional que supuestamente trabaja para el Partido Socialista, para que sea ésta la que pregunte a los villalbinos su opinión sobre la gestión de un Ayuntamiento gobernado por el PSOE. Y que conste que con esto no pretendemos poner en tela de juicio la veracidad de los resultados obtenidos, porque sabemos que ninguna empresa de estudios se presta a manipularlos. Claro que una cosa es lo que dicen los datos en bruto, otra los cocinados y una muy diferente como los presente posteriormente el cliente, sobre todo si se sabe de qué pie cojean los cocineros en cuestión. Pero en fin, como anunciábamos al principio, de aquí al mes de mayo de 2007 vamos a ver encuestas y sondeos para todos los gustos, descalificaciones interesadas, verdades a medias y mentiras flagrantes. Lo que no creo es que veamos finalizada, al menos en el plazo anunciado, esta polémica obra por mucho interés que ponga la empresa adjudicataria, algo que sabemos está fuera de cualquier atisbo de duda.
MOVIMIENTOS PREELECTORALES.- Y ya que estamos metidos de lleno en política y dado que apenas queda un año hasta la celebración de los próximos comicios locales (un alcalde serrano me decía esta misma semana: “Si a los 13 meses que restan le quitas los dos de verano, inhábiles a todas luces, uno casi de fiestas navideñas y el medio mes de la Semana Santa, comprobarás que la próxima cita con las urnas está a menos de diez meses”), de ahí que a nuestros políticos y a los que aspiran a serlo a partir de 2007 les hayan entrado las prisas y pretendan buscar cuanto antes posicionamientos favorables en el entorno de su partido, en el de sus conciudadanos e incluso en aquellos cenáculos donde se dan cita empresarios con cierto peso específico en algunos municipios.
Lógicamente, los rumores con aroma primaveral-preelectoral se han dejado sentir y así, por ejemplo, se dice que el Foro Progresista de El Escorial formado por PSOE e IU no volverá a concurrir en coalición a las próximas elecciones, algo que pone casi en bandeja la victoria y la Alcaldía a los populares, pese a que estos aún estén convalecientes tras la ‘crisis’ sufrida por los enfrentamientos internos habidos entre los apadrinados por Génova y los seguidores del ex alcalde Javier de Miguel. También nos insinúan que en Moralzarzal puede saltar la sorpresa en la familia del PP. El actual alcalde, José María Moreno, no está nada satisfecho con el trato que recibe del Gobierno que preside Esperanza Aguirre, y caso de que estas relaciones no den un giro de 180 grados de aquí a unos meses, Moreno no descarta presentarse a los próximos comicios encabezando una candidatura independiente. Nadie se atreve a confirmar esta noticia, pero sí podemos asegurarles que el burgomaestre moralzarceño, consciente de su tirón electoral, va a poner condiciones a Granados si el secretario general le pide que vuelva a liderar estas siglas.
También entre los populares de Alpedrete ha habido sus más y sus menos, o al menos eso se desprende de la escaramuza, de momento no ha pasado de eso, protagonizada por la edil conservadora Esperanza Vilches al romper la disciplina de voto en el pleno celebrado el pasado el pasado 15 de marzo donde se debatieron los presupuestos municipales para este año. Afortunadamente, Marisol Casado pudo salir del embolado y sacar adelante las cuentas. Todo parece indicar que la actitud de Vilches se puede calificar de una simple pataleta sin mayor trascendencia para el futuro del Partido Popular de esta localidad.