Collado Villalba

Más de 2.700 vecinos piden un referéndum

El martes se entregaron 2.660 firmas en el registro municipal (Foto: A. O.)
Arancha Ortega | Miércoles 22 de octubre de 2014
Stop túnel o No al túnel, sí a la consulta ciudadana serán los lemas de algunas pancartas que se verán mañana, sábado, de 13.00 a 14.00 horas en la concentración que tendrá lugar en el bulevar de la calle Honorio Lozano contra el proyecto de remodelación que se va a realizar en dicha vía. La manifestación ha sido organizada por los tres grupos de la oposición (PP, IU y ADEI) y cuenta con el apoyo de la plataforma Salvemos la Sierra.

Este proyecto está siendo el más polémico del Gobierno local presidido por el socialista José Pablo González, ya que políticos, un sector importante de los vecinos y comerciantes lo rechazan.

Así, el pasado martes, los portavoces del Partido Popular, Izquierda Unida y el grupo independiente ADEI entregaron unas 2.700 firmas de los vecinos de Collado Villalba en las que se solicitaba al regidor una consulta popular para conocer la opinión de los villalbinos sobre dicho proyecto, porque a juicio de los tres concejales es necesaria la reforma de esa calle, pero de una manera menos costosa, más rápida y que no genere tantas dudas en la población. Según explicó el representante de Izquierda Unida, Tomás Alberich, “vamos a seguir recogiendo firmas hasta llegar al 10 por ciento del censo electoral – unas 3.700 –, ya que según el reglamento es el número necesario para pedir formalmente un referéndum”. Alberich indicó que junto a las firmas “hemos solicitado una reunión con el regidor, porque en estos momentos aún se puede parar el proyecto”. Además, denunció que en la actualidad “no se están trasplantando los árboles de estas calles, sino que los están matando. Es mentira que el 85 por ciento de los árboles se iban a salvar, porque los están arrancando o talando”.

El líder del Partido Popular, Julio Henche, destacó la importancia de haber recogido este número de firmas de apoyo en tan poco tiempo. “Creo que este número es tan significativo que el alcalde debería dar un respiro porque las prisas no son buenas, sobre todo teniendo en cuenta la opinión de los vecinos. Hay muchas dudas y lo sensato es parar el proyecto el tiempo necesario y no arrepentirse en el futuro. Así tendríamos un proyecto consensuado por todos”. Por su parte, el portavoz de ADEI, Alberto Sánchez, dijo que “esta es la primera piedra”, y pidió a los vecinos “que estén en desacuerdo con esta obra que acudan a la concentración del sábado”. Además, el concejal independiente agregó: “Luchamos por que nuestras reivindicaciones lleguen a buen puerto, porque tenemos claro que esa obra no es la solución para el centro de Villalba”.


Reacciones de vecinos y comerciantes

Un año de obras
El proyecto más controvertido de los últimos años progresa a contrarreloj pese a las críticas de vecinos, comerciantes y de los grupos de la oposición. Esta semana se han dado las últimas pinceladas en el proceso de adjudicación de la obra, ya que la mesa de contratación ha hecho su propuesta a favor de la UTE formada por las empresas Ortiz y Cover. Ahora tan sólo queda esperar que el próximo martes se adjudique en la Junta de Gobierno. De esta manera, comenzarían los primeros trabajos en el mes de abril para, una vez llegado el verano, dar paso al grueso del proyecto, donde se incluye la construcción del propio túnel. Este es uno de los aspectos que más preocupan a los comerciantes de la zona, porque no hay que olvidar que tradicionalmente cuando más visitantes recibe el municipio es en los meses estivales. Otros empresarios que no tienen su negocio en esta zona también sienten una gran inquietud porque recuerdan los grandes atascos formados en el último año, debido a las obras de ampliación de la A-6, que afectaron a Villalba “y que provocaron que los clientes que vienen de otros pueblos no quisieran ni acercarse por aquí”. Por otra parte, las asociaciones de vecinos de esta zona han decidido pedir peritajes de sus inmuebles para que quede constancia de cómo se encuentran, y así, si por las obras se produjese algún desperfecto en las fachadas o viviendas, reclamar a la empresa adjudicataria, o en su defecto al Ayuntamiento, el importe de los arreglos”.