Opinión

El desgobierno de Galapagar

PUNTO DE VISTA

C. Carrizo

El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
Lo que está ocurriendo en Galapagar en el último año es más que preocupante. Si hacemos memoria, debemos en primer lugar recordar quién ganó las elecciones municipales. Las ganó el PP. Pero, ¿dónde está este partido después de un año? En la oposición. ¿Por qué? La ambición desmesurada de hasta cinco partidos políticos, les llevó a un pacto anti-natura, basado exclusivamente en intereses particulares y partidistas, que se está demostrando va en contra de los intereses de los vecinos de Galapagar y del propio municipio.

Durante este largo año para todos, ¿qué proyecto ha llevado adelante este gobierno de intereses? Ninguno. Sus promesas se han limitado a retirar un PGOU (que según parece era lo único que interesaba, a la vista de los acontecimientos) y a anunciar una quiebra económica, que cada día que pasa agravan ellos mismos aún más.

Este desgobierno es un alarde de inoperancia que raya con la negligencia, no es capaz de aprobar unos presupuestos generales para el año 2008, y un mes después se desmarca con la quiebra del ayuntamiento para tapar el hecho de no haber sido capaces de adoptar una acuerdo entre todos para aprobar esos presupuestos (la medida más importante que cualquier administración debe tomar cada año), una coartada perfecta para dejar de prestar algunos servicios y no pagar a muchos comerciantes del pueblo, que son acreedores del Ayuntamiento, pero sí hay dinero, casi 200.000 euros, para una nueva redacción del Plan General que ya estaba hecha, sólo había que modificar las partes que no gustaran, y así lo indicó el PP en el pleno en el que se retiró dicho planeamiento. Se paga a los abogados amigos de la señora Toledano por estudios que puede realizar el personal del Ayuntamiento; se otorgan concursos a dedo a los amigotes, incluso antes de que se abran los pliegos, recordemos Galapajazz.

Se metieron en el follón de las actividades extraescolares, otro despropósito que obligó a los padres a salir a la calle a reclamar el inicio de las actividades, padres a los que el señor Remacha y el señor Bock mintieron. Todo el curso está siendo un desastre, no hay suficientes profesores, cuando alguno no puede acudir a su trabajo no se cubre su baja y se deja a los niños sin clase y sin más aviso que cuando los chavales llegan a las puertas del polideportivo. En fin, todo muy progre. Por no hablar de que según reconoció el propio Jorge Escobar (Activa) en un pleno memorable los profesores habían estado trabajando sin contrato; ¿y qué?, dirá con mucha chulería. Aunque eso, no es de extrañar, pues de trabajo sin contrato la señora Toledano sabe un rato, por eso la inspección de trabajo le tiró de las orejas por tener personal en el Ayuntamiento trabajando también sin contrato.

Si hablas con gentes que trabajan en la casa consistorial o incluso con algunos de los políticos que componen el gobierno te comentan que “esto es un desastre, no funciona nada. No se saca nada adelante”. Y efectivamente, eso es lo que vemos los ciudadanos de a pie. Si les tiras un poco más de la lengua, te dirán que la división entre los miembros del gobierno es, no ya evidente, sino alarmante (incluso votan los unos contra los otros); que el ambiente entre los trabajadores y los políticos es de enfrentamiento continuo, incluso que entre los propios trabajadores empieza a haber enfrentamientos personales por culpa de este ambiente putrefacto; también que el trabajo cada día que pasa se hace más difícil e incluso deviene imposible por el desgobierno y la falta de acuerdo entre los responsables políticos (“ un día te dicen una cosa y al siguiente la contraria”), la alcaldesa no manda, no es capaz de coordinar a su equipo, etc.

Y si hablamos de seguridad (perdón: en Galapagar, inseguridad), más atracos que nunca, violencia en las calles, no se ve patrullar a la Policía, bueno sólo tienen orden de denunciar los aparcamientos indebidos. La Guardia Civil desaparecida del municipio y de las urbanizaciones, que nunca han estado más desatendidas que en estos momentos.

Y qué decir de la limpieza (perdón: en Galapagar, suciedad): se amontonan los residuos, no se controlan los vertidos, etc. Todavía quedan carteles de la propagando electoral de las municipales sin retirar, un año después. Inaudito pero cierto.

Y más y más ¿Qué ha pasado con la concejala de Hacienda? ¿Por qué se le retiraron las competencias? Va ya para seis meses que la señora Yáñez acude de florero a las sesiones plenarias y no se la deja dimitir por la guerra de intereses que hay dentro del PSOE. Silencio, no vaya a ser que alguien se entere de que los concejales del desgobierno no sólo no se hablan entre sí, sino que se aborrecen y están todos contra todos. Y mientras Galapagar sigue estancado, por disputas entre esta panda de perdedores, ¿quién de ellos va a tener el suficiente valor y amor por su pueblo para que esta situación no siga empeorando, y opten por dejar que quien ganó las elecciones y obtuvo el respaldo de la mayoría del pueblo gobierne?.

Ese es el bagaje que presentan nuestros gobernantes. Como diría aquel conocido entrenador de fútbol, “todo negativo, nada positivo”. Pero lo más alarmante no creo que sea lo pasado, lo peor es la incertidumbre del futuro. ¿Es esto lo que nos espera los próximos tres años? Creo que ni siquiera las personas que votaron a estos partidos los defienden en estos momentos; es más, estoy segura que la mayoría estarán profundamente defraudados y desilusionados.
¡No les votamos para esto! Es la frase que a muchos se les pasará continuamente por la cabeza