Agencias | Miércoles 22 de octubre de 2014
El MNU, del presidente Mijaíl Saakashvili, se ha impuesto en las elecciones parlamentarias celebradas en Georgia. Según los primeros datos oficiales, el MNU ha obtenido un 63,2% de los votos, frente al 14,2% de la Oposición Unificada (OU). Mientras tanto, la oposición ha denunciado la existencia de fraude y ha llamado a sus seguidores a tomar la calle.
"Hasta yo me he quedado atónito con el apoyo que hemos conseguido en las elecciones parlamentarias", ha comentado el presidente en sus primeras palabras tras la victoria. "Aún no hay cifras finales, pero hay una alta probabilidad de que el Movimiento Nacional consiga un número de escaños en el Parlamento que estará cerca de la mayoría", ha añadido.
Los países de Occidente consideran los comicios como una prueba de fuego para el presidente reelecto, mientras Saakashvili prosigue con su objetivo de ingresar en la alianza militar de la OTAN. Saakashvili cuenta con el apoyo de Occidente en su lucha contra Rusia.
Por su parte, la oposición ha rechazado los resultados y afirma que es ella la que se ha impuesto en las urnas, pese a que los comicios parlamentarios han sido supervisados por más de 3.000 observadores extranjeros y, aproximadamente, otros 3.000 locales.
"Según nuestros datos, la oposición ha vencido en todas las regiones de Georgia", ha manifestado David Gamkrelidze, de la OU, que acusa a Saakashvili de corrupción y autoritarismo. Por esto, el líder opositor Levan Gachechiladze ha convocado una manifestación para denunciar el fraude y anunciar los resultados del escrutinio paralelo de la oposición. Gueorgui Jaindrava, otro dirigente de la OU, ha denunciado "los abusos de la Policía y las autoridades por todo el país".
Sin embargo, un observador de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa transmitió que su grupo no había detectado graves irregularidades. "Por ahora, el proceso se desarrolla con tranquilidad y en condiciones de transparencia", ha señalado.