El Faro | Miércoles 22 de octubre de 2014
El pasado miércoles se celebró el tradicional entierro de la sardina. Comparsas, padres, abuelos y sobre todo niños se dieron cita en la plaza de la Estación a las seis de la tarde, para más tarde acercarse a alguna de las dos sardinadas que se se celebraron, en El Gorronal y en Villalba Pueblo. Aunque el tiempo no acompañó debido a las bajas temperaturas, muchos disfrutaron un año más de esta fiesta tan popular. Incluso los que se acercaron a Villalba Pueblo, pese a tener que sortear previamente las obras que se están ejecutando en la plaza de los Cuatro Caños y que a más de uno le jugaron una mala pasada.