Última hora
El local robado en Princesa se dedica a la 'alta joyería'
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
Aunque la Policía sigue realizando las correspondientes pesquisas, se calcula que el botín alcanza los cientos de miles de euros. 'Los ladrones sabían muy bien dónde iban y lo que había', indican las mismas fuentes.
Esta sospecha se fundamenta en el hecho de que este taller-almacén se dedica a la 'alta joyería' y que, además, tenían muchísimo material almacenado ante la cercanía de Iberjoya (Salón Internacional de Joyería, Platería, Relojería y Afines), a la que sus dueños pensaban acudir, y que se celebrará en Madrid entre los días 14 y 18 de febrero en los pabellones 8 y 10 de Ifema.
'Ha sido uno de los golpes más importantes y sustanciosos que se han producido en los últimos diez años en Madrid en el gremio de la joyería', han señalado fuentes cercanas a la investigación del robo en un taller-almacén de joyería situado en la cuarta planta de un edificio de la calle Princesa, próximo a la plaza de España.
La presencia de estos joyeros en Iberjoya dice mucho a la hora de calibrar el cuantioso botín del robo. En esta feria se dan cita más de quinientos profesionales del gremio. Pero los propietarios del taller-almacén atracado son, a decir de los especialistas, un 'peso pesado' dentro del mundo de la joyería. Los ladrones -ayer todavía se desconocía su identidad y procedencia-, sabían muy bien a lo que iban y, prácticamente, el suculento bocado que se iban a encontrar.
El caso ha pasado a manos del Grupo de Policía Judicial correspondiente aunque agentes de la Policía Científica ya realizaron, en su momento, una investigación ocular en el escenario del robo. Los investigadores apuntan que fueron más de cinco los asaltantes. Se habla también de seis a la vista de los detalles apreciados en el taller-almacén. No se descarta que hubieran sido más de seis.
Lo cierto es que los cacos forzaron la puerta de entrada (recuérdese que no es un local a puerta de calle, sino un negocio en planta de un edificio) y reventaron a base de sopletes y posteriores golpes tres cajas fuertes del establecimiento. Lo que allí se encontraron -ya lo intuían, por otra parte- fueron numerosas y valiosas piezas de 'alta joyería', muchas de las cuales iban a exhibirse en Iberjoya.
El empleado, ileso
Los expertos entienden por 'alta joyería' todo tipo de objetos (pulseras, sortijas, brazaletes, collares, entre otros) realizados a base de piedras preciosas, oro y platino. La Policía tampoco descarta que los ladrones se llevaran piedras preciosas sin engarzar porque el lugar no sólo es almacén sino también taller.
Para el esclarecimiento del caso también se tendrá en cuenta el testimonio del vigilante que se encontraba en el lugar robado. Por fortuna, este empleado no sufrió daños pero sí fue maniatado y su cabeza cubierta con una chaqueta.
Se investiga, asimismo, si los ladrones accedieron al edificio por el portal o por el garaje. Todo indica que el negocio asaltado debía de tener cámaras de vigilancia pero fuentes policiales han indicado que, con toda seguridad, fueron inutilizadas previamente.
Los propietarios del local prefieren no dar demasiados datos sobre su identidad y su ubicación. Uno de los empleados mostraba un silencio absoluto, incluso sobre las tareas de reparación de la puerta y las cajas fuertes.
Realizada la correspondiente denuncia de los propietarios en la comisaría del distrito de Moncloa-Aravaca, la investigación también se centra en dar con el paradero de las numerosas piezas sustraídas. ¿Dónde acaban? Dada la experiencia de robos similares, los expertos temen que salgan al extranjero. Así parece ocurrir en la mayoría de los casos porque, además, existen redes especiales y peristas que 'dan salida' a todos estos valiosos objetos.
Negocios que se arruinan
El secretario general del Gremio de Joyeros, Armando Rodríguez, ha denunciado, una vez más, lo que considera la 'pasividad del Gobierno de la Nación' ante la delincuencia.'Cuando se está tratando de eludir el índice de criminalidad que existe en Madrid no hay más que echarse a la calle para ver lo que está ocurriendo. No se ha modificado la Ley de Enjuiciamiento Criminal y sigue parado el intento de endurecer el Código Penal. Esto no es una urgencia para el Gobierno', añade Rodríguez.
'Nuestro gremio sufre la delincuencia con mayúsculas aunque se oculte. Una delincuencia que deja muertos, heridos, negocios que se arruinan, familias y empleados sin futuro', concluye.