San Lorenzo de El Escorial es el municipio turístico por excelencia en la Sierra, y el segundo en número de visitantes en la Comunidad de Madrid, sólo superado por la capital, pero desde luego no es el único, ya que cada vez son más las personas que se acercan a otras localidades de la comarca, como Navacerrada, Cercedilla, Guadarrama, El Escorial o Manzanares, y eso sin contar los miles de excursionistas que los fines de semana y durante el verano recorren las distintas rutas de la zona.
Navacerrada, con un plan de dinamización que ha renovado en buena medida la cara de su centro urbano, es el mejor ejemplo de cómo un municipio pequeño ha sabido sacar potencial a sus posibilidades turísticas sin perder su identidad. El entorno natural ha sido su gran baza, como ocurre igualmente en Cercedilla, punto de partida del llamado tren de la naturaleza y que este verano se reencontró con las piscinas naturales de Las Berceas tras un año de necesaria rehabilitación. El Valle de la Fuenfría es otro de los parajes emblemáticos de la Sierra, que también piensa ya en la futura creación del Parque Nacional, que, además de contribuir a reforzar la protección de esta comarca, actuará seguro como dinamizador de la actividad turística. Guadarrama está llamada a ser la localidad de cabecera, aunque desde el Ayuntamiento han querido adelantarse a los acontecimiento, consiguiendo la próxima puesta en marcha de un plan de excelencia con el que reforzar los valores con que ya cuenta.
En El Escorial también se estudian las medidas que se podrían adoptar en un futuro para aprovechar mejor el Monasterio de Prestado, y otros municipios como Valdemorillo (con la Cueva Museo de la fábrica de vidrio), Hoyo de Manzanares y Torrelodones (y la eterna encrucijada del Palacio de Canto del Pico) también luchan por explotar sus recursos, sin olvidar el importante trabajo que desarrolla en este sentido la Asociación de Desarrollo Guadarrama Alto Manzanares (ADESGAM).
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