El delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín Aguirre, y el director general del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), Gerardo Gutiérrez Ardoy, han inaugurado hoy los Puntos Violeta que se han instalado en las oficinas de empleo de la Comunidad de Madrid.
Con ellos, los trabajadores de este servicio, cuya labor diaria de atención a la ciudadanía es “esencial”, pueden colaborar en la detección y atención de casos, lo que supone “el primer paso para que las mujeres puedan salir de esos entornos de violencia”, ha destacado el delegado del Gobierno.
La instalación de estos Puntos Violeta en las oficinas del SEPE responde también al objetivo del Gobierno de España de “implicar a toda la sociedad en un problema estructural que hay que atajar desde sus primeros síntomas y hasta el final”, para que las mujeres sepan “que van a estar acompañadas, que van a contar con recursos, que no están solas”.
Presentación en Rivas Vaciamadrid
La presentación de esta iniciativa se ha realizado en la oficina de empleo de la localidad de Rivas Vaciamadrid, cuya Área de Prestaciones han visitado previamente junto a directivos del SEPE —Aurora Diz Monje, subdirectora general de Recursos y Organización; María Antonia Agudo Riaza, subdirectora general de Relaciones Institucionales y Asistencia Jurídica; y Ricardo Cuesta García, director provincial de Madrid—, y con la presencia de la vicealcaldesa de la localidad, Mónica Carazo, y el portavoz de gobierno del Ayuntamiento, José Alfaro.
La instalación de los puntos violeta son el resultado del trabajo conjunto del SEPE y la Unidad de Coordinación contra la Violencia sobre la Mujer de la Delegación del Gobierno, que ha contemplado la celebración de dos jornadas formativas (el 26 de febrero y el 4 de marzo) impartidas por personal de mencionada Unidad.
En ellas, los jefes de las oficinas han recibido nociones básicas sobre conceptos como violencia sobre la mujer, normativa reguladora, perfiles, proceso de la violencia, recursos y herramientas que les permitan detectar y ayudar a cualquier mujer que pudiese encontrarse en esta situación, con la idea de que luego sean ellos los que transmitan estos conocimientos al resto de empleados.
Francisco Martín ha reconocido el compromiso de los funcionarios y funcionarias del Servicio Público de Empleo Estatal, a pesar de que suponga “un reto en su trabajo, ya de por sí intenso”, y ha destacado que “su trabajo y su profesionalidad van a ser de gran ayuda en el gran reto común de acabar con la violencia machista”.
Los Puntos Violeta
En su opinión, para atajar este problema es fundamental “establecer lugares seguros para las víctimas de violencia machista, para que estas mujeres puedan ser atendidas, apoyadas y acompañadas”. Este es precisamente el objetivo de un instrumento como el ‘Punto Violeta’: crear entornos seguros para las víctimas de la violencia de género.
“Los Puntos Violeta salvan vidas”, ha afirmado y, además, “pueden ayudar a muchas mujeres, no solo a denunciar, sino también en su proceso de recuperación y salida de esa violencia que enfrentan”.
Son un símbolo, una señal para que las mujeres sepan que ese establecimiento, lugar, asociación o persona está a su disposición para escucharla y acompañarla, y conoce los recursos de atención integral. También es un recurso informativo, una guía para el entorno de las víctimas con la que compañeros/as de trabajo, clase, comerciantes con los que tratan habitualmente, amistades, familiares, vecinos/as, etc., pueden obtener información sobre cómo actuar.
Esta iniciativa avanza en el cumplimiento de los compromisos adquiridos por el delegado del Gobierno el pasado 8 de marzo y, en este sentido, ha recordado su intención de que todas las oficinas con atención a la ciudadanía que dependan de la Delegación del Gobierno dispongan de puntos violeta “en el menor tiempo posible”.