La Guardia Civil de Galapagar, el municipio donde reside Pablo Iglesias, uno de los vicepresidentes del gobierno de Pedro Sánchez, e Irene Montero (Podemos), se ha plantado, según publica OK DIARIO y a partir de ahora, según las citadas fuentes, ante las múltiples humedades de sus instalaciones despacharán desde los vehículos que tienen aparcados fuera del inmueble
La oficina de Riesgos Laborales de la Guardia Civil ha dicho que no corren riesgo por la humedad y el moho que hay en las oficinas del cuartel. Por el contrario los técnicos del Ayuntamiento les han avisado que estas sustancias pudieran ser tóxicas: “La única solución que nos dan es que trabajemos con las ventanas abiertas”, lamentan los agentes consultados por las citadas fuentes.
Estos agentes están en una situación crítica, según OK DIARIO, tras la mudanza de los dirigentes de Podemos al chalet de La Navata, lo que ha provocado el aumento de las funciones que tienen que realizar, además de que apenas tienen experiencia los agentes recién salidos de la academia.
Y a todo esto se suma el estado lamentable del cuartel de la Guardia Civil. Desde hace dos meses las humedades y el moho en el suelo y las paredes están perjudicando a los agentes de la Benemérita según denuncia realizada por la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC). En estas mismas dependencias también se han sufrido una plaga de ratas y otra de termitas.
Los agentes han recurrido a dos vías para tratar de resolver el problema. Una denuncia ante la oficina de Riesgos Laborales de la Guardia Civil y otra ante la Inspección de Trabajo, denuncias que tardarán unos meses en resolverse, de ahí que la alarma sea alta porque expertos en riesgos laborales del Ayuntamiento, según estas fuentes, que han visitado las instalaciones han avisado de una posible toxicidad del moho.