La Comunidad de Madrid dice ahora ‘que tiene que reflexionar’ sobre el Canto del Pico

Los grupos municipales del PSOE y Confluencia decidieron llevar al pleno de julio una moción sobre el grave deterioro que vive el Palacio del Canto del Pico cuya intención era dejar claro que no estamos ante un problema entre una propiedad privada y la administración, “estamos ante un problema que atañe a todos y nos concierne porque el patrimonio histórico y cultural no es de unos pocos, es de todos, porque entre todos, en la mayoría de los casos, se construye”, dice la portavoz municipal socialista torresana, Elena Repullo.

Mientras Vecinos y Partido Popular se aliaban para que la iniciativa no prosperase, los primeros absteniéndose y los segundos votando en contra, nos encontramos con la desagradable sorpresa de que las primeras manifestaciones del Consejero de Cultura, Turismo y Deportes, Jaime de los Santos, manifieste que va a “iniciar un periodo de reflexión sobre la forma de protección de este Bien de Interés Cultural”.

Ante estas palabras de los socialistas nos reafirmamos en que el Canto del Pico sigue corriendo peligro, más cuando el máximo responsable cultural de la Comunidad de Madrid ha declarado en los medios de comunicación que “Si hoy llegara este edificio para ser incoado BIC, habría que reflexionar mucho”, indicó en una entrevista a Madridiario. “No sé si la residencia de verano y lugar de escapadas del dictador Francisco Franco, por sus cualidades artísticas y arquitectónicas, tiene todas las características para ser un BIC”.

Estas declaraciones no hacen sino que acrecentar nuestra inquietud sobre el futuro de nuestros principales emblemas históricos. “No compartimos que el Canto del Pico sea visto únicamente como la casa de verano del dictador, cuando fue protagonista de hechos históricos tan importantes como la muerte de Antonio Maura a la Batalla de Brunete, que se dirigía desde allí”, señala Elena Repullo, para quien la postura del Consejero de Cultura deja bien a las claras que “hay que insistir, hay que seguir reclamando y poniendo sobre la mesa que un trozo de la historia de España está en peligro de desaparecer”.