La celebración del Corpus Christi, este domingo 3 de junio, marca otra de las fechas en las que Valdemorillo une la tradición con mayúscula. Porque tras la misa a oficiar en el templo parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, a partir de las once horas y la posterior procesión que marchará por las calles del centro urbano, llegará ese toque especial con el que nuestro pueblo añade vistosidad y atractivo a esta jornada, reviviendo un año más, y van cuatro siglos, una costumbre peculiar y sobre todo, única en la zona. Y es que en plena Plaza el Iglesia, vecinos y autoridades se congregarán para presenciar como manda la tradición la destreza del abanderado, dando infinidad de giros a la bandera a la que con sus tonos verdes, amarillos y rojos, se custodia para lucir en las grandes celebraciones ondulándolo y desenrollándolo de alrededor de su cuerpo, bailándolo al compás de los sones serranos interpretados con dulzaina y tamboril y el estandarte por el que vela la Hermandad de la Esclavitud del Santísimo Sacramento, cuya fundación se remite al año 1662 y volverá a acaparar todas las miradas desplegadas así, una vez más, el singular boche con la que este municipio corona su Corpus.
El acto finalizará por la tarde, cuando la Hermandad invitará a sus miembros y a los responsables municipales a compartir encuentro que será aprovechado para efectuar los nuevos nombramientos de los abanderados y Hermanos Mayores.