Aún dista mucho de ser completamente rehabilitado, pero en el palacio de Monesterio, de San Lorenzo de El Escorial, se han llevado a cabo unas obras de consolidación de las ruinas, lo que asegura el mantenimiento del edificio. Eso ha provocado que la asociación Hispania Nostra haya retirado el monumento de su Lista Roja del Patrimonio (
www.listarojapatrimonio.org) y pase a su Lista Verde.
El edificio es de fábrica sencilla pero de gran solidez y su cubierta, posiblemente de pizarra en su origen, es ahora de teja curva, y en ella todavía se aprecian varias chimeneas. La zona cuenta con la declaración de Territorio Histórico y además esta finca está catalogada como Bien de Interés Cultural con la categoría de monumento.
Monesterio aparece citado en el libro de Montería de Alfonso XI, como una magnifica zona de caza. En 1504 los Reyes Católicos mandan provisión ordenando que “en lo concerniente a las cercas sitas en los términos de las villas de Monasterio y Campillo, pertenecientes a Dª. Teresa Enríquez, se atuviesen al tenor de la ejecutoria ganada por Madrid contra el Real de Manzanares”.
En 1594 Felipe II ordena la despoblación de ambos lugares. Así quedó pues decidida su despoblación para convertirlos en bosques de caza para el Rey y dehesas para los frailes jerónimos. Se ajustó el precio con los pobladores, generosamente tasado, que tuvieron que abandonar sus hogares. El Rey Felipe III mandó construir una casa de oficios que es el actual palacio abandonado. Se edificó entre los años 1611 y 1613 por el arquitecto real, Juan Gómez de Mora, conservándose sus planos en la Biblioteca Vaticana. Con la desamortización de Madoz, (Ley de Diciembre de 1869, firmada por el general Serrano, Regente del Reino) estas fincas son declaradas “nacionales” y se dispone su venta, pasando a manos privadas. Desde entonces han sido utilizadas como cotos de caza y dehesas ganaderas.