El CUC Villalba más depresivo es fácil presa del Unión Adarve (0-3)

Demasiado toro para el actual Villalba, que claudicó con un 0-3 reflejo de las diferencias entre un grupo atribulado por mil cosas, que compite con lo justo, y otro al que le bastó con mostrar un nivel aceptable para finiquitar el partido al descanso.

Ya de entrada, se vio en la alineación que era un CUC Villalba para la supervivencia. Descontadas las bajas de Alberto Olalla, por cuyos cuatro partidos de sanción ni siquiera se sabe si el club ha recurrido, más la del lateral David, dos meses de baja que dejan el equipo sin lateral derecho específico, mientras presuntamente Futsmile bloquea la llegada de refuerzos, pues así lo deslizaron algunos directivos, la planilla enseñó las suplencias de Álex Seidel y Álvaro Esteban, dos jugadores clave con problemas físicos. Mala cosa en un club sin fisioterapeuta, como siguió revelando la mañana de caras de póker en el Municipal. Mala cosa para los dos entrenadores, para Nacho Benito, que ya ha lidiado en el CUC Villalba bajo todos los chaparrones posibles, el más grande, cuando se quedó con la única compañía de Miguel Ángel Cidoncha y ambos obraron el milagro de salvar el club, y para Marcelo Román, que entre el ascenso y este extraño estreno en Tercera División acumula una experiencia al alcance de muy pocos.

Ambos improvisaron un once sin Del Estal en la portería, sustituido por el canterano Miguel, con Carlos Cano de lateral derecho para aprovechar la feliz vuelta de Juan Olalla –la mejor noticia-, pareja como central de Javi Hernández, con Edu Prieto ya titular en el medio campo y con otro canterano, Edu Capote, en el enganche. Con esto, el Villalba aguantó el pulso medio tiempo, sujetando todo lo peligroso del Adarve menos a Gianni. El pequeño extremo, un desatascador en toda regla, escarbó varias veces por la derecha tirando de electricidad en el recorte. Tras avisar con un centro espléndido que Héctor cabeceó alto en posición franca, colocó otro a la medida de De Paz, cuyo testarazo a escuadra cambiada fue de libro. Como en Alcalá, el 0-1 fue un golpe para la frágil confianza del Villalba, que encajó tras un saque de banda el 0-2 de Juanma. Terminando el primer tiempo, sólo una combinación entre Prieto y David Gómez para habilitar la entrada en el área de Pedregal, que perdió la ocasión con un mal centro, más un intento de tiro sorpresa de Casado desde 50 metros, acreditaron cierto bagaje ofensivo por parte villalbina. Al descanso, los aficionados ya habían asumido la superioridad adarvista y algunos se preparaban para un castigo mayor. No llegó porque el Villalba encontró aire en los cambios y porque el Adarve aflojó la soga. Por un momento, hasta pareció que los serranos podrían meterse en el partido, pero el juez de línea de su ataque señaló un dudosísimo fuera de juego cuando Vivi encaraba un mano a mano con el portero. La jugada encendió a la grada, al tiempo que el colegiado expulsaba por doble amarilla a Edu Prieto y se enredaba en una serie de decisiones controvertidas.

Con diez, el Villalba perdió el amago de reacción y el Adarve sacó rédito a su oficio y a la frescura arriba que aportó Joel. El media punta redondeó el resultado con un gran gol a tres minutos de la conclusión que hizo desfilar al público con resignación, camino del aperitivo. Un golpe deportivo más para un Villalba colista destacado, y al que los últimos acontecimientos han dejado a los pies de los caballos. Y el quinto jinete será el Sanse en Matapiñonera, cuando pase otra semana que se anuncia agitada.

CUC VILLALBA: Miguel; Carlos Cano (A), Juan Olalla (A), Javi Hernández, Pedregal; David Gómez (Álvaro Esteban, 67′), Edu Prieto (AA 78′); Vivi, Edu Capote (A) (Álex Seidel, 56′), Fabio (Zárate 80′ (A)); y Quique Casado (A)

UNIÓN ADARVE: Robert; Gonzalo (A), De Paz, Juanma, Lluch; Olmedo, Cristian (A) (Rubén 68′); Gianni(Joel 60′), Héctor, Goya (Fran, 75′ (A)); y Agus.

GOLES: 0-1, De Paz (25’) ; 0-2, Juanma (40’); 0-3, Joel (87’)

ÁRBITRO: Gómez Blázquez (0).

INCIDENCIAS: Unos 350 espectadores en el Municipal de Collado Villalba, en mañana soleada y agradable.