Los aullidos de Lobo Cojo

Nuestro personaje anda estos días más contento que un niño con una caja de chupa-chups porque, según nos ha dicho, le han prestado un polígrafo que piensa instalar en su rotonda y está dispuesto a realizar las pruebas pertinentes a nuestros políticos con el objeto de saber, sobre todo en el complejo asunto de las promesas electorales, si mienten o dicen la verdad. Lobo Cojo dice: “Imagínate a los candidatos contestando, por ejemplo, a la siguiente pregunta: ‘¿Si usted, después del 27 de mayo, fuese el elegido por los villalbinos para regir los destinos de nuestro Ayuntamiento, bajaría los impuestos?’. Seguro que todos contestarían que sí y yo no tendría más remedio que responderles: ‘El polígrafo dictamina que... usted miente’. Menudo corte ¿verdad? Bien, el simulacro ahí queda y por tanto ahora le corresponde decidir a los alcaldables si vale la pena o no elaborar programas electorales de dudosa credibilidad, porque al margen de estos inventos de la técnica, la gente, como no es tonta, tiene su propia vara de medir y sabe perfectamente cuándo les intentan vender la burra con promesas que no tienen ni pies ni cabeza. Y cuidadin, cuidadin con lo que dicen, porque según los datos que manejan algunas empresas demoscópicas, el PSOE puede ganar las próximas elecciones, pero la mayoría absoluta, que exige 13 actas de concejal, se va a vender bastante cara. Incluso se comenta que ADEI e Izquierda Unida (el PP difícilmente va a superar la barrera de los 10 ediles) son los que al final pueden tener la llave de la Alcaldía”.